viernes, 11 de octubre de 2019

Bernie y su pistola


Bernie ha vuelto a desenfundar su revólver como si estuviese protagonizando Sin perdón. Disipados los humos de aquella andanada pagafantera que inundó de titulares apocalípticos la prensa deportiva especialista a finales de 2018 y comienzos de 2019, se ve que Liberty Media no tenía contemplado vender tan pronto la Fórmula 1, aunque queda la duda de si Ecclestone estaba detrás de todo porque pretendía recomprarla a un precio menor que el de venta...

Dudas, lo que se dice dudas tampoco es que hubiera muchas. Ernesto y yo solemos dedicar unos minutos al Boss cada vez que nos vemos para tomar café. Por un lado, resultaba de perogrullo afirmar que Liberty podía vender si las cosas se torcían porque, al fin y al cabo, todas las corporaciones habilitan una salida en sus aventuras [El plan B de Liberty], y quizás más importante: en lo tocante a un mundo tan contaminado por la figura pública y negociante de Bernard Charles Ecclestone, resulta demasiado iluso no contar con él cuando hay avistamientos OVNI [Oportunidad de negocio].

En fin, como en las películas del Oeste, una vez fracasado el sabotaje de la vía ferroviaria por donde pasa el furgón blindado, Bernie hace como que se sube a la locomotora y ofrece consejos para que Liberty no descarrile. El último: que una vez logrado el apoyo de Red Bull, Ferrari y Mercedes AMG, apunte con una pistola al pecho de los demás equipos y la norteamericana les obligue así a escoger si lo toman o lo dejan.

No calibro la impronta que han tenido las armas de fuego en la vida del británico —¿recordáis aquello de «si me apuntas con una pistola asegúrate de que está cargada»?—, lo que sí me desasosiega de tanta referencia pistolera es que ha supuesto la base de su actividad al frente del FOM y el único resultado que ha arrojado es una merma del espectáculo y una quiebra importante dentro de la parrilla.

Hablábamos de ello ayer [¿Se irá Mercedes-Benz?], pero con la decisión de las escuderías y la FIA sobre la normativa 2021 como telón de fondo, pienso que un hombre con su edad y experiencia mejor haría dejándose de remover las aguas del río y pegar tiros a diestro y siniestro, y arrimase el hombro para que las escuderías alcancen un consenso cuanto antes. Tiene mano para ello, mucha...

Nos jugamos el futuro con este acuerdo de mínimos y se nos está acabando el tiempo, y dicho sea de paso: a muchos aficionados también se nos está agotando la paciencia de tanto ver una actividad que lo tiene todo para ofrecer un show de primera, que sin embargo languidece porque los despachos, los mamomeos y la política, pesan como no han pesado nunca. Así que si tiene que haber pistolas, por favor, que sean de agua.

Os leo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Liberty trajo consigo la decisión de incorporar a una nueva y más joven audiencia. La aversión de Ecclestone por los sub 30 era muy evidente. Y a lo peor, no se equivocaba...

La banda sonora de los Chemical, mucha participación en redes sociales, retransmisiones por internet... Todo esto apunta al corazón de los que hoy siguen los e-sports por twitch.

Es que claro, los ya por entonces pocos y exclusivos septuagenarios van perdiendo las ganas de entender por qué ha cambiando tanto esto. Dónde está el peligro, el estruendo, las mujeres en piel y el tabaco?

Para volver hoy apetecible el producto, hay que pensar en función de veganismo, la ideología de género, el respawn, la ecología, el fan Boost, y los ositos.

Por eso digo que a lo peor, están entrando el caballo de madera en Troya. Estas nuevas audiencias pueden no ser leales a una actividad ligada a producir CO2.