Os va a quedar una Fórmula 1 grandiosa, y, sólo por eso, cuando me retire sonreiré al ocaso sin volver la vista atrás, como en los mejores finales de las películas del Oeste...
A ver, que os lo tengo dicho: la frecuencia en que se mueven nuestro deporte y sus grandes eventos no cuenta con nosotros, así que no os lo toméis por lo personal. Bien mirado, mejor MadRing que un Carmen Jordá Street Circuit o un Tizona Ring.