La competencia es tan buena, pero tan buena, que, a la menor oportunidad, los que saben cómo se lleva bien un negocio te lo llenan todo de proveedores únicos y exclusivas, no vaya a ser que la sana rivalidad por ver quién lo hace mejor les acabe saliendo como tiro por culata, un suponer.
Sky Sports ha renovado como «hogar exclusivo» de la F1 hasta 2029, y hasta aquí todo bien [Sky Sports to remain home of Formula 1 until 2029 after deal extended in all Sky markets], lo malo surge cuando nos paramos a pensar en la calidad de su cobertura de eventos, en tanto que, al ejercer prácticamente de monopolio informativo, carecemos de capacidad objetiva para contrastar si juegan para la Fórmula 1 y los aficionados, o, por el contrario, invierten su tiempo en modelar el mercado con el único afán de mejorar sus resultados contables al final de cada ejercicio.