Con siete podios, la pole en Hungría y casi 100 puntos por encima de su compañero (242 contra 156), bien podemos decir que Charles Leclerc ha salvado la temporada a Ferrari... si se puede hablar así de que la rossa haya firmado (as usual) una campaña en la que se ha vuelto a romper los dientes.
Se ha comprobado que sacar a Carlos no fue una gran idea. Comprar a Lewis ha resultado ser un engendro todavía peor, y todo por no haber mandado a Fred Vasseur a tomar por donde amargan los pepinos en cuanto dio muestras de que, como ya suponíamos, La Scuderia le venía muy grande al francés.









