Lo prometido es deuda, y puesto que en la anterior entrega de esta serie os comentaba que por azares del destino había encontrado entre las cajas del estudio el 33 TT 12 de Minichamps [33.3 Prova], lo mejor es que vayamos con él dejando para otro momento a sus hermanos, que a saber dónde andan metidos en estos instantes...
En fin, el protagonista de esta entrada daba continuación a la experiencia del 33 TT 3 de 1972 con chasis tubular (Telaio Tubolare, origen del acrónimo TT), debido a que ofrecía una mayor capacidad de torsión, algo imprescindible para aprovechar la ventaja de los 500 caballos de potencia que llegó a ofrecer su motor de 12 cilindros con arquitectura V180º o Flat-12 (otro día, si encaja, volvemos a hablar del concepto boxer frente al flat), diseñado por Carlo Chiti.