domingo, 21 de octubre de 2018

Mejor una autoescuela


No faltará quien lo defienda, pero no tiene un pase lo que sigue sucediendo alrededor del compañero de Sirotkin en Williams, y no hablo sólo de lo ocurrido en el Gran Premio de los USA, donde el canadiense se ha llevado puesto a Fernando Alonso, sino de la trastienda del asunto: una parrilla que apenas tiene sitio para un Ocon o un Wehrlein, o un Kubica o un Vandoorne, o un Kvyat o un Ericsson, mismamente, mientras Lance dispone de espacio holgado para continuar buscando su lugar en el mundo o una carambola como la que le llevó a ser tercero en Azerbaiyán 2017.

El de Montreal parece un asado mal cocinado. Permanece ad nauseam en ese puntito en que la carne no tiene vuelta atrás en el horno porque ya está encallada a los pocos minutos de haber comenzado el proceso, y lo peor de todo es que en su segundo año en la máxima disciplina resulta evidente que carece de capacidad para dar destellos de calidad.

Hombre, tiene sus números y obviamente hay que respetárselos, pero si con el FW40 del año pasado era relativamente fácil conseguirlos, con el FW41 de esta temporada la cosa se ha complicado bastante y donde tocaba ver al piloto por falta de coche sólo hemos visto buena suerte o continuos despropósitos.

Don Lawrence, consciente de las carencias de su retoño y de lo importantes que son los números en este negocio, no se ha cortado ni media: si Williams no ofrecía futuro, se compra Force India a ver si así, aunque visto lo visto a lo mejor lo que tenía que haber adquirido Stroll senior era una autoescuela, por aquello de rematar la faena, más que nada.

Os leo.

2 comentarios:

Antonio L. dijo...

Se fue de rositas el niño porque así se lo permitieron......... y de paso otra muesca más en el haber de Charlie Whiting para con nuestro genio.

Un alonsista

matador dijo...

El niño dice que vio un hueco y se metió dentro... éste es como un albañil: agujero que ve, agujero que quiere tapar, aunque se le va la mano con la maza y acaba reventando tabiques. No tardará mucho, pero se va a acabar haciendo daño. Lo peor de todo es que se acabará llevando a alguien por delante, y eso ya es más grave pues la pasta de papá no va a poder tapar muertes.

A Patrese lo culparon (https://elpais.com/diario/1978/09/13/deportes/274485605_850215.html) de la muerte de Peterson por una mala arrancada en su año de debut con Arrows, pero el longevo Riccardo demostró tener talento y ganas para hacer buenas temporadas, con podios, victorias y un subcampeonato, y no desmerecer en equipos como Brahbam, Williams o Benetton con compañeros como Piquet, Mansell o, incluso, Schumi.

Stroll no tendrá jamás ese talento, porque nunca ha destacado en ninguna otra categoría, al contrario que Riccardo, más que la de la cuenta corriente. D. Lawrence, viendo como la categoría ha fabricado cartonatos en la última década, sin duda, ha comprado muchos cartones para el bingo, y el inefable Charlie lo sabe (y lo bendice). Sin embargo, creo que no les va a salir bien, al contrario, en cada carrera está demostrando ser un peligro para sus compañeros, y para sí mismo.

La pena es que no es el único de este perfil, mientras otros se van quemando por el camino como Ocon, Werlein, Vandoorne,... El año que viene al lado de Checo saltarán chispas en las primeras carreras, hasta que Papá Stroll prescinda del Cuate.

En fin, otro zurullo más en el mojón de la F1 actual.

Salu2!