miércoles, 10 de octubre de 2018

La novia de Mazinger Z


Se nos va acabando 2018 y a la Fórmula 1 se le empieza a notar falta de fuelle. Tenemos un amejoramiento de normativa previsto para este mismo año que viene pero apenas hay información sobre él porque sale más rentable, ahora, seguir diseccionando la agonía de Ferrari y Sebastian Vettel o intentar meter el dedo en salva sea la parte al vecino. 

Desgraciadamente no es nuevo. A decir verdad resulta bastante rutinario, pero me parece importante esto del silencio meditado alrededor del microcambio del reglamento técnico, porque en el fondo delata que sin cosas futboleras nuestra Fórmula 1 ni es apasionada ni es nada. Por cierto, ¿se ha visto ya en la Moviola si Verstappen zancadillea a Vettel?

Para los que no sepan de qué estoy hablando, decir que la Moviola consiste en lo mismo que hace en los análisis posteriores a cada prueba Anthony Davidson (Sky Sports) con los acaecidos y faenas. La usaba la RAI aunque fue introducida en España por el periodista Pedro Ruíz a principios de los setenta del siglo pasado, como sección del programa Estudio Estadio.

Ralentizar la realidad gracias a la técnica (vídeo entonces, digital ahora), llevarla adelante y atrás, incluso acelerarla, facilita la labor de saber si existe empujón o mano, por ejemplo, o quién merece tarjeta amarilla o roja.

En nuestro caso concreto sirve para conocer quién exige el carné a los demás sólo porque sostiene el embudo y mantiene la boca grande mirando constantemente hacia él. No es que sea una gran hazaña tal muestra de ventajismo aunque no deja de resultar interesante comprobar que sus promotores son siempre los mismos. La técnica no es relevante cuando ellos no la manejan con soltura, pero supone una frontera infranqueable cuando alquien que no son ellos intenta abrir la boca. ¿Qué sabrás tú de la IndyCar o del WEC...?

Y bien, no quiero perder el hilo, se avecina un cambio en la Fórmula 1 que pasa por quitar importancia al alerón delantero y consecuentemente modificar el difusor y ala trasera para que exista mayor facilidad en los adelantamientos. Yo diría que el fondo plano va a adquirir mayor relevancia que ahora y que los monoplazas van a tender a ser un poquito más neutros o incluso sobreviradores. A Daniil Kvyat le van este tipo de configuraciones por su manera de conducir, y se me ocurre que quizás sea por eso que ha sido rescatado por Toro Rosso para 2019. Para otro tipo de explicaciones, ya sabéis: ¡pechos fuera!, que gritaban desde el puesto de conducción de la novia de Mazinger Z.

O leo.

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