Dale datos a Binotto...

Yo haciendo algo por la vida, concretamente dos tortillas españolas de dos dedos y medio de alto, amén de una preciosa ensalada de lechugas «hoja de roble» y «romana», con aceitunas rellenas, granos de granada, abundante tomate y cebolleta, con colofón de una miaja de atún y unas sardinillas de lata, y aprovechando mi descuido aparecía en Nürbu una parte de la quintaesencia vettelista, ésa que no ha digerido todavía que quizás Ernest Hemingway escribió Por quién doblan las campanas pensando, precisamente, en los ídolos que no saben cuándo retirarse.

Por no desperdiciar tan bizarro material —léase bizarro a lo anglosajón, que aquí resulta más pertinente—, he acabado publicándolo en plan compendio ya que, anónimo aquí, anónimo allá, uno no sabía si el interlocutor era la misma persona o dos desde el mismo sitio aunque con distinto celular, o ha sido la fortuna la que ha propiciado que parezca lo que sin duda no es...

Bueno, esto podría acabar resultando como en el chiste: Cariño, ¡no es lo que parece!, así que mejor hacemos sorpasso y nos centramos, ya que también podría haber empezado diciendo: «De los creadores de "cuántos mundiales tiene el autor de este blog para criticar a Vettel", tenemos la suerte de disfrutar del "dale datos a Binotto, so listo".»

Sí, vamos a darle datos al bueno de Mattia ya que a esta gentecilla que se frota con la almohada cada noche pensando en Sebastian y su bigote, no entiende a estas horas que si el 98% de la prensa internacional está dando gorrazos a Ferrari es porque la carrera de hoy ha sido una puta mierda para la rossa, y entendedme que estoy haciendo uso de la riqueza del español como me enseñó don Camilo José Cela, autor por el que no siento un especial cariño, la verdad, pero al que nunca hurtaré la magia de enseñarme que un idioma, en este caso el nuestro, reside en que puede ser usado en toda su amplitud, le pese a quien le pese.

Y bien, los datos son estos: tres dobletes de Mercedes AMG en tres carreras y un Hamilton que hoy tiene que estar la mar de contento porque ha respondido en la salida a las insolencias de Bottas y lidera en estos momentos la tabla de Pilotos.

Puede parecer baladí, pero el británico saca al intocable de Maranello nada más, y nada menos, que 31 puntos con tan sólo tres Grandes Premios celebrados, lo que nos pone en que a 10 puntos de ventaja por carrera, el campeonato sacará el The End antes de llegar a Spa-Francorchamps. Brackley también supone otro dato que debería meterse en la mollera Binotto. Recién estrenado el Mundial 2019, la alemana casi dobla en puntuación a la italiana, y eso que quedan dieciocho citas por delante...

Entiendo las reservas de quienes quieren negar la realidad, pero en Fórmula 1 se está para ganar, no para ir perdiendo los menos puntos posibles. Y lo tengo dicho —y maldita la gracia que me hace recordarlo—, pero Lewis tiene la fea costumbre de aprovechar este tipo de chorradas. Hoy mismo, sin ir más lejos: ha ganado la prueba imponiéndose al contestón Valtteri en los primeros metros posteriores a la arrancada. El resto ha sido gestión, inmaculada gestión, fundamentalmente porque no había rivales a la vista, zurrón en el que cabe meter hoy a una Ferrari que no quería molestar a Vettel, o pretendía darle una nueva oportunidad o lo que sea.

Os leo.