Por fin Will Power

Will Power acababa en Elkhart Lake con la sequía de victorias de casi dos años de duración que llevaba a cuestas, y lo hizo firmando una carrera limpia para él, que comenzó recordando el ruidoso Grand Prix of Detroit [Dixon en Detroit], pero que, por fortuna, no pasó de suponer una alerta temprana que no fue a mayores, ni tuvo otras consecuencias que el descarte de la tropa de Chip Ganassi, excepción hecha de Álex Palou.

Así las cosas, el Grand Prix of Road America se iniciaba con Armstrong llevándose puesto a Lundqvist, situación que pilló desprevenido a Newgarden, quien, a su vez, golpeaba a Colton Herta. De los cuatro considerados, sólo el de Nashville pudo continuar en carrera con opciones, y no fue una cuestión menor, pues acabaría presentando batalla al final de la misma e imponiéndose a Scott McLaughlin por el segundo cajón del podio. Pero no adelantemos acontecimientos.

Nuestro protagonista no estaba entre los candidatos a la victoria, lo que, en cierto modo, le ahorró ser objetivo para sus rivales y facilitó que navegara con comodidad en tráfico hasta poder poner sus cartas sobre la mesa. Sin duda la ausencia de los Arrow McLaren ayudó a este estado de cosas —ni O'Ward, ni Rossi ni Pourchaire estuvieron entonados en Road America—, y también que Newgarden y McLaughlin se vieran comprometidos por el rendimiento de sus respectivos neumáticos.

Penske actuó con la cabeza fría y dotó a su monoplaza número 12 de alternativas durante el transcurso de la prueba, mientras que el piloto australiano las aprovechaba escalando puestos casi como penetra un cuchillo caliente en un trozo de mantequilla. De esta manera, sobre el giro 42 de los 55 propuestos, McLaughlin y Newgarden entraban a pits para enfilar el último relevo, pero Power se mantenía en pista estirando la vida de sus gomas durante dos vueltas determinantes, ya que, para cuando se reintegró, ni el norteamericano ni el neozelandés suponían un escollo insalvable. Quedaba Herta liderando la cita, pero tarde o temprano también debía pasar por boxes...

Will Power esperó acontecimientos mientras gestionaba su ventaja sobre sus oponentes inmediatos, y terminó viendo en primer lugar la ajedrezada. Tras él la veía Josef Newgarden y, en tercera posición, Scott McLaughlin. Álex Palou acababa en la cuarta plaza —el español arriesgó lo justito pues precisaba sumar puntos—, y Kirk Kirkwood cerraba el Top Five.

Os leo.