miércoles, 27 de marzo de 2019

Le Mans en Nürbu


Ya avisé en su día que va para larga la serie sobre las 24 Horas de Le Mans [#24LeMans], y aprovechando que es miércoles y que esta semana abordaremos la década de 1950, me apetecía recordarlo, primero de todo por agradecer de nuevo el recibimiento que habéis dado a todas las entradas que he escrito hasta este instante, y segundo, y no menos importante, por reiterar que ni la vamos a concluir en breve ni, seguramente, su final tendrá lugar en 2019.

No me apetece ir rápido con esta saga porque si escribo en Nürbu sigue siendo para reflexionar y para aprender, y en este sentido, estoy aprendiendo mucho sobre la historia de una disciplina que me ha gustado, me sigue gustando y es fácil que lo siga haciendo. Así las cosas, mientras satisfaga estas dos aspiraciones continuaré dale que dale con ella.

Dicho esto, algunos me habíais indicado que resultaba complicado acceder a los contenidos previos a cada texto, y como esto se debe, fundamentalmente, a que poco a poco los contenidos se ven más a través de dispositivos móviles que en la web del blog, para solucionarlo he integrado al pie de cada entrada dos enlaces, uno a la entrega anterior y otra a la siguiente, con la intención de que resulte mucho más cómodo leer de una tacada los años que el lector considere oportuno.

En versión web todo estaba más apañadito. La sección Etiquetas te lleva a través del enlace correspondiente a la línea temporal de todo el tinglado, pero bien está que ahora dispongamos de una rutina que permita que desde los propios textos podamos acceder al resto. En todo caso, ya advierto que llevamos 19 entregas y tan sólo hemos llegado a finales de la década de los cuarenta del siglo pasado, y eso contando con que entre 1939 y 1948 no hubo 24 Horas de Le Mans...

No sé cómo lo haremos a partir de ahora más allá de lo que os he contado, pero ya estoy pensando en algunos episodios de receso que contarán con una entrada específica en la que incorporaremos los enlaces a la parte que se ha tocado ya. Sea como fuere, gracias por lo leído y, por descontado, por el recibimiento, y también, mucho ánimo y paciencia, porque, como decía más arriba, por fortuna nos queda mucha tralla por delante.

Os leo.

No hay comentarios: