Lo hemos vuelto a hacer

Esta tarde nos han vuelto a otorgar el Premio SafetyCast al Mejor Blog español de F1, y ya van tres en los cinco años de vida de esta iniciativa (2012, 2015 y 2016), y para colmo de bendiciones, en las dos que faltan fuimos finalistas (2013 y 2014).

Y como hago siempre que nos suceden estas cosas, quiero compartirlo con vosotros porque como he dicho hasta hartarme, esta aventura que navega ya hacia las 10 temporadas seguidas, es más vuestra que mía. Me aguantáis a diario, me toleráis, me corregís las faltas de ortografía, las semánticas y las otras, y Nürburgring, El Infierno Verde, continúa en pie de guerra porque seguís a mi espalda, porque os noto cerquita y porque os leo, porque siempre os leo.

Es fácil echar el ratito aquí. Horas de trabajo mecánico con el Photoshop o de darle a la plumilla o al lápiz sobre el tablero de dibujo, encuentran su recompensa en cada entrada y en vuestros comentarios. Si no fuese así, hace años que lo habría dejado. En serio, no es ninguna broma.

Los más cercanos saben de sobra que ha habido momentos en mi vida de bloguero en que me habría resultado más fácil decir basta que continuar, así que no os toméis a mal que os recuerde que tenéis una buena cuota de responsabilidad en esta historia, y, por supuesto, en sus éxitos. Los fracasos son exclusivamente míos, eso va en la nómina.

Dicho lo cual, tengo que deciros que esta edición no la deberíamos haber ganado. Fui propuesto para jurado y acepté, pero una serie de feas circunstancias que no vienen al caso, me hicieron renunciar al encargo el pasado sábado por la mañana. No siendo jurado, muy a mi pesar el blog seguía compitiendo una vez arreglado el follón originado por los trolls y los chivatos. Acepto y asumo las circuntancias, y el fallo definitivo, por supuesto. A nadie le amarga un dulce y a mí seguramente menos, pero también quiero anunciaros que El Infierno Verde no se presentará a la convocatoria de 2017.

Hay gente buenísima por ahí que necesita proyectar su trabajo y darlo a conocer sin que un dinosaurio como Nürburgring camine cerca. Como Nico, también nos retiramos en la cresta de la ola, y creo honestamente que en esto, como en otros muchos asuntos, os tengo a mi lado. Hay que dejar espacio. El futuro es innegociable. Necesitamos nuevas ideas como aficionados. Nuevas maneras de pensar, nuevas formas de reflexionar, de enfocar; nuevos métodos para dar vuelta a la tortilla que nos sirven precocinada desde Gran Bretaña.

Como remate, hemos quedado finalistas en la sección de Mejor Comunicador en RR.SS. que ha ganado Albert Fábrega. Hablo en plural porque ahí también habéis estado vosotros. Desde la primera a la última, desde el primero al último. En el podcast con mis compañeros, con tazas de café por medio en Gorliz, o por teléfono, o a pelo en Twitter y en Facebook... Joder, sois muchos, tantos que no me atrevo a mencionaros porque seguro que me olvido de alguien, cosa que no querría.

Y ahora, con vuestro permiso, levanto mi copa de Dewar's White Label —si llego a saberlo me pido un Macallan 18 Old Years—, y brindo con vosotros por los años que llevamos juntos y lo conseguido, que a tenor del premio que nos han otorgado hoy y la nominación, no parece poco.

Os quiero. Os leo. Gracias.