Si la normativa sigue buscando el espectáculo, o eso dice la FIA, el chusco incidente que sufrió Checo Pérez rebasando al Williams de Latifi en Bahrein nos insinúa que los adelantamientos a lo peor van a seguir estando jodidos esta temporada, como las anteriores.
Pongámonos en situación: el monoplaza del mexicano está en rebufo tras el coche del canadiense, lleva el DRS abierto e inicia la maniobra de adelantamiento y, oh wait!, al salir de la estela del vehículo de Grove pierde la tapa motor lateral izquierda, más bien, las turbulencias la succionan y arrancan...
En este escenario parece que no hay mucho misterio ni paradojas: el RB16B es muy delicado y crítico aerodinámicamente hablando, se mete donde no debe, se topa con un aire sucio más potente de lo estimado y ¡zas!, la estela lateral del Williams hace el resto.
Pero tenemos otro dato: Fernando se aplica a adelantar a Hamilton en una situación muy similar a la protagonizada por Pérez con Latifi, aunque sale de la aspiración con un ángulo más abierto que el coche del de Guadalajara y literalmente se va a tomar por el saco con respecto al W12 del británico —en la imagen de abajo vemos al español retomando la trazada y por eso la distancia apreciable resulta menor.
Yo diría que el asturiano se sabe lo que puede suceder si se mantiene cerca del otro vehículo y saca por las bravas su A521 de la zona comprometida, ergo, podemos dar por válido que el riesgo existe y que lo conocen todos los equipos, lo que me lleva a preguntar en qué coño andaba pensando la FIA cuando retocó el reglamento para 2021 si, a la postre, la estela de aire sucio actual parece haber cobrado más importancia que en 2020...
Ahí lo dejo. Os leo.
2 comentarios:
La FIA sólo vende humo para tapar sus verdaderas intenciones: el octavo brittish. Si de verdad prospera eso de la doble carrera del finde y la parrilla invertidas para el domingo, vamos a ver los sábados carreras por ser el más lento, precisamente por lo que dices: el aire sucio es caca y la FIA la sigue cagando.
Los aviones invertidos que son a groso modo lo que son los formula uno, no es de ahora, si no que comenzó cuando se empezaron a poner alerones por doquier y a investigar el efecto suelo que hoy en día está más o menos camuflado.
Es inevitable que los ingenieros tengan su cuota de participación en el diseño de los actuales monoplazas, ya que sin ellos no tendríamos tema de conversación sobre los fórmula uno como tales. La actual competición, mal que nos pese, se ha convertido en un campeonato de ingenieros espabilados que luchan por encontrar lagunas en el reglamento que favorezca la supremacía de su invento de cuatro ruedas.
Las diferentes dictaduras en relación a los campeonatos conseguidos consecutivamente por las grandes escuderías se han sustentado sobre dos patas, ingenieros "ingeniosos" y pilotos como mínimo de capacidades muy buenas (tipo Vettel o Raikkonen) y los genios (tipo Senna) que son los que ponen ese plus que le pueda faltar al coche para ganar.
Veo imposible que los ingenieros dejen de luchar por su campeonato de trucos aerodinámicos y que los pilotos adquieran más protagonismo, ya que si no fuera así la fórmula uno dejaría de ser lo que es para convertirse en una Indy.
No se cual es la fórmula exacta para permitir una mayor igualdad en la parrilla, pero como Liberty no se pongan las pilas cada vez menos espectadores se engancharán a la F1.
Un saludo de un alonsista.
Publicar un comentario