Estaba por no escribir esta entrada, vale, va, lo confieso, pero después de haber estado casi la temporada 2019 al completo dando la turrada con que Grove parecía que estaba demasiado cómoda haciendo última de la parrilla, no he podido resistirme a echar una líneas.
Como sabréis de sobra a estas horas, Robert ha firmado como piloto reserva de Alfa Romeo en 2020, aportando un jugoso patrocinio que hace que la escudería de Hinwil se denomine el año que viene Alfa Romeo Racing Orlen [Kubica será piloto reserva de Alfa Romeo en 2020]. Sin duda hay gente que sigue creyendo en él, aunque lo más interesante del asunto está en que el de Cracovia se ha despachado a gusto con su antigua patrona, Williams: ni tenían en cuenta sus indicaciones y experiencia, ni han movido un dedo por mejorar el FW42.
Huelga decir que me siento feliz por quien pudo ser Campeón del Mundo en 2008, pero más, si se me permite decirlo, por todos aquellos que no han salido del tullido y el tipo que no debería estar aquí, mientras la vida y la realidad les pasaban literalmente por encima.
Williams ha estado a otras cosas en vez de a competir. A la británica le salía a cuenta ser el farolillo rojo de la parrilla [A la deriva (Williams)] y el resultado es éste: PKN Orlen se lleva su dinero y pone más pasta en el proyecto Alfa Romeo que el que trae Nicholas Latifi a Grove. Imaginemos ahora lo que supone jugar una mala baza incluso con las cartas marcadas...
Os leo.
Os leo.
1 comentario:
Poderoso caballero es Don Dinero. Maldito Thiessen que nos jodió un bonito escarmiento a las niñas bonitas del selecto club formulero.
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