Leo que Alonso y Hamilton se odiaban al final de la temporada 2007 y que eso dividió al equipo (sic), y me entran ganas de saltar de alegría porque sucediera tan tarde y no al principio, en Australia, por ejemplo, o en Mónaco... ¡Dios!
Estamos perdiendo la guerra y cada vez siento menos ganas de seguir sujetando mi Dragunov de bolitas. Este oficio está muy mal pagado, creo que llevo diez años y medio diciéndolo, pero el caso es que me ha dado por echar el ratito intentando hablar del purrús que ha producido entre el personal que Antonio Lobato lleve las riendas de la temporada 2018 desde Movistar+.
Independientemente de que resultaba sencillo predecir lo que ha sucedido cuando la operadora decidió reducir presupuesto y meter a Merlos, Villadelprat y los demas, en una puñetera encerrona [Regreso al futuro, el drama], lo importante de todo esto es lo que dijo don Rodrigo Rato en comisión parlamentaria: es el mercado, amigo... Y es el mercado, nos pongamos como nos pongamos, porque la modalidad friki de disfrutar de la Fórmula 1 no da como para que una operadora amortice el desembolso.
Es decir, hace falta aumentar la audiencia porque sólo de frikis y alabanzas y palmaditas en la espalda en redes sociales no se vive, y este es el matiz que se nos está escapando.
Lo cierto es que he hablado tanto de este fenómeno que produce un poco de pereza volver a él. El Fandom se extiende como una plaga y si no sabes lidiar con él acaba devorándote como la marabunta, que humildemente es lo que creo que ha sucedido. No gustaba Lobato pero la retransamisión de Fórmula 1 se convirtió en un buen negocio en España y llegó donde nadie imaginaba porque era en abierto y la podía ver todo quisque. No voy a discutir si la calidad que se ofrecía era buena, mala o mayúscula, pero Movistar TV vio cacho y planteó una alternativa de pago que también fue bien durante el periodo de convivencia, 2014.
Pero a partir de 2015 llega el monopolio, entra Canal+ a gestionarlo todo y la cosa deja de funcionar como se preveía. Tampoco voy a discutir si Josep Lluís Merlos es mejor que Antonio Lobato, o si los colaboradores de uno eran mejores que los del otro. Cada profesional tiene su estilo y llega a un público determinado, mientras que hay otra parte del mismo que los soporta como puede. Es irrelevante. Lo importante aquí es que los frikis se felicitaban cuando ya teníamos suficientes avisos de por dónde venía la bicha —el enlace que os he puesto arriba es de febrero de 2015, y juro que no soy la bruja Lola aunque sí un tío bastante avispado.
Pues bien, tres temporadas, varios cambios de equipos de retransmisión y varias toneladas de anuncios después, la operadora necesita mejorar sus cuentas y ha recurrido a quien ha considerado que lo puede conseguir: Lobato.
Es decir, hace falta aumentar la audiencia porque sólo de frikis y alabanzas y palmaditas en la espalda en redes sociales no se vive, y este es el matiz que se nos está escapando.
Lo cierto es que he hablado tanto de este fenómeno que produce un poco de pereza volver a él. El Fandom se extiende como una plaga y si no sabes lidiar con él acaba devorándote como la marabunta, que humildemente es lo que creo que ha sucedido. No gustaba Lobato pero la retransamisión de Fórmula 1 se convirtió en un buen negocio en España y llegó donde nadie imaginaba porque era en abierto y la podía ver todo quisque. No voy a discutir si la calidad que se ofrecía era buena, mala o mayúscula, pero Movistar TV vio cacho y planteó una alternativa de pago que también fue bien durante el periodo de convivencia, 2014.
Pero a partir de 2015 llega el monopolio, entra Canal+ a gestionarlo todo y la cosa deja de funcionar como se preveía. Tampoco voy a discutir si Josep Lluís Merlos es mejor que Antonio Lobato, o si los colaboradores de uno eran mejores que los del otro. Cada profesional tiene su estilo y llega a un público determinado, mientras que hay otra parte del mismo que los soporta como puede. Es irrelevante. Lo importante aquí es que los frikis se felicitaban cuando ya teníamos suficientes avisos de por dónde venía la bicha —el enlace que os he puesto arriba es de febrero de 2015, y juro que no soy la bruja Lola aunque sí un tío bastante avispado.
Pues bien, tres temporadas, varios cambios de equipos de retransmisión y varias toneladas de anuncios después, la operadora necesita mejorar sus cuentas y ha recurrido a quien ha considerado que lo puede conseguir: Lobato.
Es el mercado, amigo... Una miserable cuestión de pasta en un entorno que, sigo pensando, debería dejarse de monopolios y pasos ineludibles por caja, abrir la mano, permitir la sana competencia, para que frikis, aficionados y legos en la materia, elijan de verdad quién coño les narra las carreras.
Y por terminar: no ha vuelto el calvo, ha vuelto el periodista que consiguió que retransmitir la Fórmula 1 fuese rentable en España. Antes lo podíamos ver gratis a cambio de soportar anuncios, y ahora le veremos con anuncios y pagando... El mercado.
Os leo.
4 comentarios:
Como te gusta esa frase eh!!!
Lo que chirría de todo esto es lo que dijo Eloy en el último GpCast, que ahora tenemos lo mismo que siempre, pero pagando. Bajo mi punto de vista Movistar debería replantearse no las retransmisiones de los grandes premios, sino todo el canal de f1. Subjetivamente, me gustaría ver crónicas de gp antiguos, biografías de pilotos, ingenieros o jefes de equipos, análisis de coches históricos y por que lo fueron... Más. De friki
Buenos días, creo que lo que quería decir Rato era " es el mercado, estúpido" rememorando aquello de " es la economia, estupido" (en inglés) y claro como estaba delante del juez...
Coincido con Enrique... no sé si será por falta de presupuestos, de derechos de imagen, de tiempo o de ganas, pero tienen una oportunidad única de crear un canal de contenidos interesantes, de generar afición, de fomentar la cultura automovilística en este país y lo único que hacen es repetir hasta la saciedad carreras y reportajes entre fin de semana y fin de semana de gp...
Odio eterno al monopolio moderno :)
Movistar lo llevaría mejor si tuviesen un poco de manga ancha . En vez de pagar un pastón para darlo en cerrado y que cada vez haya menos y menos aficionados...
¿Porqué no compartir derechos con alguna cadena en abierto a condición de que la retransmitan en diferido a las 22:00 de la noche?
De esta forma , pagas menos , aumenta la audiencia y entre los nuevos aficionados seguro que los habría que acabarían queriendo verlas en directo y se abonarían a la plataforma .
En caso contrario , la F1 acabará teniendo menos seguidores que el balonmano , el cual también codificó canal + en su día .
Fleichié
Publicar un comentario