Kimi en Camelot

El castillo de Camelot no es tan idílico como lo narran los bardos. De Kimi, por ejemplo, se dice que el sábado pasado cometió un error grave con idéntico coche que Sebastian, en Bakú, olvidando que el Rey lleva desde hace dos Grandes Premios una leva en el volante que no incorpora el monoplaza del finlandés... Y a saber qué más, dos puntos.

Esto del idéntico vehículo me trae por la calle de la amargura desde hace años y hace muy poquito dedicaba una entrada al asunto [El mismo coche]. Y en este caso me fastidia aún más que de costumbre porque el olvido, si podemos llamarlo así, incide en ése poner a Iceman por debajo de Vettel a todas horas, cuando lo propio sería admitir de una puñetera vez que Ferrari trabaja fundamentalmente para el alemán, cosa bastante lógica, por cierto, si atendemos a que cobra un pastizal y, en consecuencia, hay que rentabilizarlo mejor que a su compañero.

Bien, como espero que se comprenda, no se trata de defender a uno u a otro sino de constatar que sólo contemplando la coño presencia de una tercera leva en el volante, el SF71H de Sebastian ya es diferente al de Kimi.

Si el bendito instrumento, además, actúa como un diferencial manual, esto conlleva ciertos arreglillos previos que incidirán en la conservación de la estabilidad ante un reparto de frenada, repito: manual. Y como en Fórmula 1 dos y dos suelen resultar cuatro, siempre —habas contadas, vamos—, para comprobar si el chisme ofrece realmente ventajas o no, lo normal es que una vez que se ha tocado el monoplaza, el piloto número uno lo use con la novedad y el segundo lo utilice en modo muestra contraste, que es en lo que imagino que estamos.

A esto me refería el otro día cuando decía que Raikkonen convive en la actualidad con un vehículo que está siendo cambiado al gusto de su compiyogui. Vettel usa la nueva leva (de momento), y aquí no caben más preguntas, ¡Señoría! A Kimi le está tocando hacer de cobaya en el laboratorio, bailar con la más fea mientras Ferrari decide si el cachivache es beneficioso o resulta una pérdida de tiempo...

Dejo a lo expertos repetir que Iceman comete un error en la Q3 de hace tres días, que a la postre, resultará lesivo para los intereses de la de Il Cavallino. Entre la ameba de Lobato o el sobrevalorao de los moñas y aquel tío gigantesco que en 2005 se merecía el Mundial más que en 2007, a mí me queda un piloto al que sigo admirando cada temporada que pasa. Ahora ejerce de escudero en la mítica, pero no nos equivoquemos: ya querría yo tener un individuo como él cubriéndome las espaldas.

Y eso, que Camelot no es lo que era. Y que os leo, faltaría más.