The rhythm of the heat

Hoy ha sido festivo en la comunidad de Euskadi, y aunque he aprovechado para descolgarme de todo, sigo con dolor de cabeza, aunque no tanto como para evitar continuar dando vueltas al concepto que está usando ahora mismo el RB8 con notable éxito.

Decía ayer que todo es legal en el coche austriaco, y lo reitero hoy por impedir que estas líneas sean entendidas como una acusación torticera sobre un trabajo que me merece todos los respetos. Y sí, estoy escuchando a Peter Gabriel.

Antes de meterme en harina conviene recordar que en verano, después del G.P. de Europa y de que el monoplaza austriaco mostrara signos de rejuvenecimiento, sospeché para cachondeo de la curia que Newey utilizaba un embudo para estabilizar la zaga del RB8, comprimir el eje trasero sobre el suelo y de paso conducir el aire frío de los laterales del vehículo hacia la parte trasera, sorteando así el volumen de la carrocería.

Aire frío sobre el difusor, una especie de DD encima del fondo plano en vez de debajo o quién sabe si una propuesta casi neonata para ese 2014 que ya aparece en el horizonte. Escribí dos entradas al respecto (como podéis ver en el enlace de más arriba), aunque como tantas cosas en mi vida, dejé inconclusas porque tras el G.P. de Gran Bretaña podíamos ver el embudo de los demonios (resaltado en color rojo en la imagen de abajo) y mi discurso había perdido punch y hype como por arte de magia y gracias a aquello, confieso que me sentí más aliviado pero más solo que la una porque como de costumbre, los obispos no enmendaban lo que habían afirmado con anterioridad.

Por suerte ya había dejado por aquel entonces que el cuarto escalón de mi esquema, el que correspondía al supuesto segundo agujero visible en los laterales de la parte terminal de los pontones, carecía de abertura. Os muestro mi hallazgo de nuevo.

Llegado a este punto, confieso que no me importaba que el canal menor estuviera ciego, aunque ello contraviniera las explicaciones de los que pensaban que ese llevaba aire hasta la abertura del starter, porque entendía que el importante era el grandonte que podemos ver en la fotografía de más arriba, formando en conjunto un sencillo sistema de convección en el cual, la cuña exterior era calentada por los gases de escape y el sistema se encargaba de repartir el calor producido a lo largo de la cintura inferior de la carrocería en su conjunción con el fondo plano.

En este orden de cosas, siempre he sospechado que el canal secundario ha tenido una terminación cerrada, de manera que el aire caliente producido en la cámara principal (la cuña hueca) se enfriaría a lo largo del recorrido para retornar hacia el punto de mayor calor, como ocurre en las calefacciones de agua galiente, porque el ardid facilitaría que los flujos terminales de los pontones fueran donde quiere Adrian: hacia el difusor, muy bajos, pero más cerca de las ruedas que del centro del vehículo.

Me ha dado por comprobar con el Photoshop si el esquema sigue siendo idéntico al que vimos hace unos meses, y sí, el canal secundaro sigue apareciendo cerrado.

Con lo cual la supuesta segunda abertura no es otra cosa que una pared de algo que bien podría ser mi cámara de alta temperatura, un lugar que contiene algo que calientan los gases de escape del RB8 para que maese Coanda deje de tocar las narices en la parte final de la carrocería.

Me voy a cenar y vuelvo en un rato.