viernes, 18 de agosto de 2023

18 de agosto


Como cada año, más o menos por esta misma fecha, toca recordar en Nürbu que sigo vivo para contarlo y que las cicatrices cada vez molestan menos, no por lo que ocultan, ni siquiera por lo que se aprecia de ellas en la piel y el alma, sino porque empieza a ser todo tan relativo que produce mucha pereza revisitar según qué andanzas y lugares del pasado.

Sesenta y cuatro, en el Ducado de Gorliz hoy han sonado sesenta y cuatro salvas de cañón en mi honor. Bien es verdad que a partir de ahora no podré volver a recurrir a When I'm Sixty-Four de los Beatles, pero que me quiten lo bailao, que decía aquél, y que Dios se apiade de vosotros porque reboso sueños y canciones de amor, aunque cada vez tengo más claro que a lo peor no llego a todo y alguien me tiene que escribir el epitafio. ¡Veremos!

Os leo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Enhorabuena José!!!
Y por muchos más!!!
Saludos desde Argentina
Osvaldo

Anónimo dijo...

¡Muchas felicidades! No suelo escribir por aquí pero la ocasión lo merece

pocascanas dijo...

Muchas felicidades, y un abrazo virtual desde el Coño Sur!!

Luis