Falta saber cómo acaba el día. Sin embargo, el de Bélgica es un Gran Premio tan especial que las miserias quedan en su circuito con el culo al aire, que decía aquél.
Sin novedad en el frente. Mercedes AMG continúa siendo el Goliat bíblico y aunque parecía que había por ahí un David que podía tumbarlo, en Spa-Francorchamps se ha mostrado escasito de vitaminas. Y lo malo no es eso. Williams ya está aquí y parece que Red Bull también quiere su pedacito de pastel.
Don Maurizio no anda tan jacarandoso como antes. Consciente de que todavía queda mucha temporada por delante, ha dejado de jugar con Kimi en fechas recientes. Hace falta equipo para llegar vivos a Abu Dhabi y nada mejor que tenerlo todo atado y bien atado por si las moscas. Otra cosa es el SF15-T, cuyas líneas maestras definieron Rory Byrne y Simone Resta siguiendo sus indicaciones, para más señas un diez o doce de diciembre pasado, sigue adoleciendo de falta de punch.
El coche diseñado para Raikkonen, ha mutado en una solución de compromiso que tiende más a servir a Vettel que al finlandés. Es del todo lógico y normal, lo he comentado demasiadas veces, lo que no me impide pensar en la cantidad de puntos que se han dejado en la cuneta, por una decisión que a finales de año puede pasar factura si no la está pasando ya.
Canadá, Austria y Gran Bretaña, pruebas en las que Iceman flaqueaba mientras se las veía y deseaba adaptándose al nuevo proyecto y en las que Sebastian mostraba ya que le estaba cogiendo tono y temperatura, suponen para Ferrari una notable sangría. Un sencillo cálculo sobre lo obtenido por La Scudería en las seis primeras carreras del año, de Melbourne a Montecarlo, nos ofrece como resultado 26,33 puntos de media, que baja a 17,66 puntos en el periodo posterior, de Montreal a Silverstone.
Es obvio que además del cambio de balance en el SF15-T, ha irrumpido Williams en el plantel de cabeza, equipo que junto a Force India y Lotus, recibió en el Gilles Villeneuve el nuevo software de Mercedes-Benz —haciendo el mismo cálculo de antes, vemos cómo Grove pasa de 13,2 puntos de media entre Australia y Mónaco, a 23,33 entre Canadá y Gran Bretaña—, lo que podría justificar que Maranello haya apostado por forzar la maquinaria —Kimi tuvo que abandonar en Hungría por fallo en el ERS en la vuelta 55 y ayer mismo, sufría otra avería mecánica durante la calificación en Spa—.
Sea como fuere, que es a lo que iba, la de Il Cavallino se enfrenta a la prueba belga con demasiada presión. El campeón del mundo de 2007 sale desde la decimoséptima posición y su compañero alemán, desde la octava gracias a que Romain Grosjean penalizaba ayer con cinco plazas. No parece un buen escenario, y menos si cabe, si contemplamos que Ferrari esperaba llegar a Monza mordiendo los calzones de Hamilton y Rosberg.
Como decía al inicio, falta saber cómo termina la jornada, pero todo indica que a pesar de haber ganado en Hungaroring, a Ferrari se le empiezan a acumular los problemas, lo que vulgarmente conocemos por aquí como que te crecen los enanos cuando pones un circo. Normal entonces, que Maurizio haya perdido la alegría: su equipo se parece demasiado al de Luca.
Os leo.
1 comentario:
¿Cuantas averías acumula Kimi en lo que va de temporada?
¿Y cuantas acumuló Fernando al final de la temporada pasada?
¿Después de tanto despido hay cosas que no cambian?
Y dirán que estas son con buen rollete dentro del equipo.
Fernando el año pasado respondía a cada una de esas averías con la mejor de sus sonrisas, y que se notara lo forzada que era, pero buen rollete, ¿eh?
Entonces me acuerdo de Patrick Head y me pregunto como se traduce mecánicamente en el coche eso del buen rollete.
¡Saludos al anfitrión y a los invitados!
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