Cualquiera diría que la FIA, al oír la palabra Vettel hubiera
reaccionado igual que Schlageter al escuchar la palabra cultura aunque
su frase haya pasado a la posteridad citada por Goebbles u otros
prohombres de la mitad del siglo pasado, con miedo cavernario en todo
caso.
Llamadme pasado de cuerda, pero he descubierto hace poco que un actor
que creía que cantaba en sus ratos libres, es un cantante que en mi
acervo no pasaba de haber hecho de Billy el niño en aquella
película de Sam Peckinpah en la que a Pat Garret era interpretado por
James Coburn. Sí, llevo varios días entonando mis aceleraciones y pausas
con Kris Kristoferson en la oreja, gracias a que mi amigo Xabi Urrutia,
quien seguramente jamás leerá estas líneas, me cogió de la mano hace un
mes, más o menos, para enseñarme una vez más que de la caverna se
renace, que en la caverna vivimos todos a veces sin saberlo, y que la
caverna, lejos de ser un lugar hostil, supone un estado del alma en el
que conviene estar al menos una vez en la vida para entender, que la
atmósfera fuera de la cueva está repleta de aromas y sonidos
indescriptibles, que huelen y suenan mejor cuando los descubres por ti
mismo.
Me dejo de circunloquios porque los vettelistas
tienen que estar mordiéndose los muñones. Su héroe de los últimos
tiempos, el hombre llamado a marcar una época, no mola lo suficiente a
la FIA, hasta el punto de que ésta está tratando de marcar el paso para
que cosas como las sucedidas en estos últimos años no vuelvan a ocurrir,
o en su caso, parezcan que son más difíciles.
Siendo sincero me veo en la obligación de recordar que a Infiniti,
patrocinadora volumétrica de Red Bull y por supuesto de sus pilotos, no
le va bien que Sebastian gane siempre: «It’s a fact that we are in F1
to gain awareness of our brand, and that’s all about getting eyeballs
on screens. From that point of view you could say Sebastian has been too
successful. Wrapping up the championship with four races to run is
maybe not good news for us from that perspective. But we have to look at
it from the long-term perspective. It’s clear that Sebastian is
emerging as a legend of the sport, someone’s whose records will stand
him as a giant of the sport in years to come. He’s achieving that
success with us, and working with us as a brand ambassador. If he wins
the final two races of the year then he will be making history. The
beauty is that, where other drivers would have taken a holiday after
winning the championship, Seb has come back more determined than ever.
He is very conscious of the history of the sport, and he appreciates his
place in it. I think that drive is one of the things that makes him
special.» [Andy Palmer, Infiniti, 7 de noviembre de 2013].
Vale, lo traduzco de aquella manera porque nos resultará útil: «Es
un hecho que estamos en Fórmula 1 para lograr que nuestra marca sea
conocida y destaque en los ojos de quienes ven las pantallas. Desde este
punto de vista se puede decir que Sebastian ha tenido demasiado éxito.
Desde esta perspectiva, la solución del campeonato con cuatro carreras
por disputar tal vez no sean buenas noticias para nosotros. Pero tenemos
que mirarlo a largo plazo. Está claro que Sebastian surge como una
leyenda del deporte, de alguien cuyos registros lo mantendrán como un
gigante del deporte durante años. Alcanza su éxito a nuestro lado y
trabaja con nosotros como un embajador de marca. Si él gana con dos
carreras de ventaja, entonces hará historia. La belleza de todo esto
consiste en que donde otros conductores han desfallecido en vacaciones,
Seb ha vuelto más decidido que nunca. Él está muy consciente de la
historia del deporte y aprecia el lugar que ocupa. Pienso que el paseo es una de las cosas que le hacen especial.»
Bueno, espero que lo hayáis entendido. La cosa de Sebastian resulta
demasiado fácil incluso para el principal patrocinador de Red Bull y la
FIA obra en consecuencia porque las alubias son las alubias. Trofeo pole
para que Vettel siga logrando galardones aunque sean tan bobos como
éste, y final de campeonato con valor doble en Abu Dhabi, para que la
caverna respire un poco y no se haga necesario llevarse la mano a la
pistola como cuando se escucha la palabra cultura.
Toda una declaración de intenciones. La Fórmula 1 como una sencilla
cuestión de números mientras las cosas importantes ni son acariciadas, y
entre tanto babeamos con la película Rush y yo sigo escuchando a
un actor advenedizo que gracias a Xabi, me está resultando una delicia
sencillamente porque desde la confortabilidad de la cueva, había
entendido la realidad de otra manera.
1 comentario:
Dices que la FIA "está tratando de marcar el paso para que cosas como las sucedidas en estos últimos años no vuelvan a ocurrir, o en su caso, parezcan que son más difíciles."
Y mientras siguen apareciendo informaciones sobre los fenómenos extraños que acunaba el RB9:
http://www.omnicorse.it/magazine/33275/f1-ecco-cosa-nascondeva-la-red-bull-racing-nel-t-tray
¿El mass-dumper era aerodinámica móvil y esto no lo es?
Hay cortes que por mucha vaselina que les pongan van a seguir sangrando.
¡Saludos!
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