Carlos y las exquisiteces

Cuándo por malo cuándo por bueno... Carlos Sáinz era bluf después de la clasificación del sábado y el domingo era un tío suertudo que se había beneficiado del Safety Car para obtener su sexto puesto en Silverstone después de retener como un condenado a Daniel Ricciardo.

Hemos hablado mucho de lo peligrosa que resulta en estos momento la exaltación maclarenista que ha surgido de la nada, imagino, para tapar el cicatero trato que se ha dispensado a la de Woking hasta el pasado Gran Premio de España [McLaren progresa, y no es poco (22-06-2019)], pero en lo tocante a sus pilotos, especialmente al madrileño, desgraciadamemte estamos cumpliendo paso a paso la misma liturgia que, hace más de una década y media, nos puso a los pies de los caballos de la prensa extranjera con Fernando Alonso y, en bandeja, que nos dieran hasta el cielo del paladar a partir de 2005 y con repunte en 2007.

No se trata de comportarse como hacen algunos canadienses de domicilio con Lance Stroll o los orange boys con Max Verstappen, básicamente consiste en que si no defendemos lo nuestro difícilmente lo hará nadie.

Esta es la parte que no nos entra en la cabeza. Tenemos a Pedro que es gafe de libro; a Marc, que a pesar de haber ganado las 24 Horas de Le Mans, bastante tiene con seguir en La Scuderia, como si eso fuese fácil; Soucek, Juncadella y Rodríguez que pasaron por la F1 sin pena ni gloria; Merhi, un tipo con muy mala suerte... De Alguersuari mejor no hablamos, y del asturiano, tampoco...

No creo que me deje a nadie, pero todos ellos juntos, con Carlos, por supuesto, darían para que los United Kingdom sacaran pecho edades y edades invertidas en cantar a la gloria de su madre y, of course!, a la de la Queen Isabel II. Pero en España somos más especialitos y antes que exponernos a perder unos clics o a que el gilipuertas de turno nos dé unfollow en redes sociales, preferimos afilar los cuchillos y no dejar títere con cabeza entre los del terruño.

El caso de Sáinz es paradigmático. Está en un proyecto que recién ha echado a andar pero ya lo andamos evaluando como si tuviera opciones al título. Zak Brown nos ha dicho por activa y por pasiva que el año para empezar a sacar la cabeza es 2020, pero nada, en 2019 ya exigimos y exigimos...

Carlos, a pesar de un comienzo de temporada bastante tristón, saca en la actualidad 16 puntos a Lando Norris. La realidad nos dice que lo está haciendo bastante bien, pero en nuestro país siempre resultará más rentable tratarle como si estuviera muy por debajo de las expectativas (sic), lo que sumado a los olvidos recurrentes que comete sobre él la realización del FOM, nos pone en que el de Madrid, como nos descuidemos, en nada se nos convierte en un sobrevalorao de esos que les gusta tanto a los plumillas ingleses y alemanes para sacar punta a sus lápices.

¿Tuvo suerte en Silverstone? Sin duda, pero también supo aprovecharla; porque un Safety Car, como un accidente o un fallo mecánico en un coche rival, son circunstancias de la carrera que aprovechas o pierdes.

Os leo.