Todo al «rosso»

Mañana, Charlie Whiting no tomará ningún riesgo. Hamilton ha firmado la septuagésima pole de su carrera profesional y aunque caigan cuatro gotas, que a estas horas se prevén que sean algunas más, salimos bajo protocolo de pista mojada, con Maylander al frente, y a ver si se cumple lo que se adoptó en septiembre del año pasado [La FIA publica nuevas normas para el Mundial 2017]. Vamos, que id olvidando ver algo parecido a la arrancada de Singapur de hace dos semanas.

Dicho lo cual, si a perro flaco todos son pulgas, Ferrari ha hecho bueno el refrán metiendo a Sebastian Vettel más presión de la que necesita el piloto alemán y, desde luego, de la que necesitamos los tifosi a estas alturas del campeonato.

Un fallo en la unidad de potencia del coche número 5 durante la tercera sesión de libres ha dado origen a un trabajo contrarreloj en el garaje de la italiana con la intención de resolverlo, con sustitución de cachivache completo y todo, pero como viene siendo tradicional con estos complicados chismes, y también con la rossa, el asunto no ha quedado todo lo fino que se habría deseado y Vettel no ha podido completar la Q1 por un nuevo fallo, esta vez en el turbo.

El de Heppenheim sale último y se comenta que podría hacerlo desde el pitlane porque Maranello puede haber decidido cambiar completamente el propulsor y varios elementos de la UP, que de haber sido sustituidos en otro momento habrían acarreado sanciones en parrilla.

Bien, se acabaron las buenas noticias, por decirlo de alguna manera. El SF70-H tiene suficiente capacidad para remontar hasta las primeras posiciones, pero bajo la lluvia Sebastian va a tener que estar fino, fino, filipino, no tanto para poder avanzar como a la hora de evitar caer en las previsibles emboscadas que surgirán de media parrilla para atrás.

Kimi ha hecho todo lo posible en clasificación y se ha colocado segundo, inmediatamente detrás de Lewis, pero partiendo en régimen de Safety Car podemos darnos con un canto en los dientes si es capaz de contener a los Red Bull y Valtteri Bottas hasta que Vettel aparezca en los retrovisores de su coche.

Está jodida la cosa para La Scuderia pero hasta el rabo todo es toro y no vamos a deslucirnos dando la guerra por perdida porque una batalla nos haya salido torcida.

Hay carrera, va a haber emoción y queda por ver si no hay otras circunstancias que nos amenicen la fiesta. Mercedes AMG es la favorita. Hamilton puede comenzar a poner clavos en el ataud de Vettel en lo que respecta al Mundial 2017, pero quedan 56 vueltas por delante para todos y cada uno de los veinte pilotos que disputan el Gran Premio de Malasia, que no se nos olvide este pequeño matiz.

Forza! Os leo.