A las declaraciones de Kimi Raikkonen de hace unas semanas, en las
que el finlandés de Lotus exponía su inquietud ante la posibilidad de
que la de Enstone no siguiera evolucionando el E21 más allá del verano,
se han sumado recientemente las de Ross Brawn afirmando que más pronto
que tarde, Mercedes AMG tiene que comenzar a concentrar sus esfuerzos en
el vehículo del año que viene.
Ante este panorama cabría preguntarse qué demonios está sucediendo, o
acaso en qué consiste la gracia de una temporada prevista a 19 pruebas
que terminará si nadie lo remedia, cuando hayan transcurrido sólo la
mitad de ellas, porque el equipo que no haya rascado nada para entonces,
lo más seguro es que siga corriendo con lo que tiene y deje de meterse en berenjenales porque la prioridad está puesta en el horizonte y no a pie de pista, en el campeonato.
Si esto es competición pura, como dicen,
lo normal sería que se pasara de 2012 a 2014 disputando 2013 como Dios
manda. Pero se ve que no. Todo el mundo anda echando cuentas y los
balances imponen su ley, con lo que hablar de deporte comienza a sonar
incluso iluso y mencionar la palabra «fraude», aunque fuerte, parece lo más recomendable para describir lo que está sucediendo.
Así las cosas, no es de extrañar el desinfle de contenidos que se nota en la blogosfera y en Internet entera. Hay poco o nada de dónde rascar y construir una miserable entrada sobre lo nuestro,
comienza a convertirse en una tarea propia de titanes más allá de
recurrir al sentido del humor, que como es sabido, vale tanto para un
roto como para un descosido, y sin duda, resulta útil para sortear con
la mejor de las caras incluso los más ásperos desiertos.
En fin. Nada por aquí y nada por allá, y esta vez más que nunca, y la
Fómula 1 se muere por el efecto de la inanición y las vacaciones, que
no es por nada, pero al diablo se le ocurre montar un calendario con
tanto agujero. Habrá reanimación, por supuesto, pero también surgirán
las consabidas quejas sobre la flojera de las audiencias, sobre la
precaria sostenibilidad del invento, y mil y una estupideces más que
alienten la necesidad de un cambio en el modelo, que como
siempre perseverará en seguirnos tomando el pelo a los aficionados
mientras enfoca sus gracietas a mantener como sea un tinglado que hace
agua por los cuatro costados, y en el que además, la competición parece
ser lo de menos.
No quiero ni imaginar la que se nos viene encima cuando a la vuelta
de agosto nos encontremos con 7 u 8 escuderías que ya hayan tirado la
toalla (Lotus y Mercedes AMG parecen firmes candidatas a hacerlo, y
McLaren puede estar en ello), y tengamos que sufrir un final de
temporada como aquella carrera de Indianápolis 2005, en la que sólo
compitieron dos equipos.
Red Bull, Ferrari y Sahara Force India, y si la de Silverstone
consigue sobrellevar sus problemas económicos hasta entonces, y pare
usted de contar, luchando a partir de Spa-Francorschamp por algo… Bonito
escenario repleto de nuevos récords que batir, de nuevas hazañas que
lograr, en una temporada que la FIA, el FOM y la FOTA han convertido en
un sainete que ya avisa final chusco cuando abril no ha terminado y sólo
se han disputado 4 miserables carreras.
2 comentarios:
Y como sigan endureciendo compuestos,no sé si llegaremos al verano...
Sasto, que diría Forges. Habrá que dejarle tiempo a Red Bull para que desarrolle su coche del año que viene aunque eso tenga que pasar por regalarles el campeonato anticipadamente. XDDDDDDD (recurriendo al sentido del humor, como proponía nuestro anfitrión.)
(¿Más?) Por fin he encontrado el punto G de mi mujer. Resulta que lo tenía su hermana.
Mi opi sobre lo de las gomas, ahora en serio, en "O acaso Pirellis."
¡Saludos al anfitrión y a los invitados!
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