Mientras llega el 7º de caballería a Lorca

Como sabéis, la población murciana de Lorca sufría el pasado miércoles las furias y tempestades de un terremoto, quedando rota por los suelos.

Llevamos unos días viendo por la televisión, escuchando por la radio, o leyendo en Internet, que los vecinos y autoridades están trabajando duro por devolver la normalidad a las calles. Dicen que van a haber ayudas institucionales que van a ser diligentemente tramitadas, pero mientras llega el prometido séptimo de caballería hay que acometer las menudencias del día a día.

Dicho esto, sin querer, he recordado una experiencia de la que creo haber hablado en este mismo blog hace tiempo, de cuando se desató un infierno sobre Santurce pillándome a mí en su periferia, con tan sólo 7 años. La gente lo pasa mal, no tanto por lo que sucede sino por el umbral de incertidumbre que se abre ante ella, y puesto que fui espectador de aquel suceso que acabo de comentar, puedo imaginar bastante bien lo que deben estar sintiendo ahora mismo los lorquinos.

El Ayuntamiento de Lorca ha habilitado una cuenta para ayuda a los damnificados en La Caja de Ahorros de Murcia, para que quien quiera y pueda, se sume con una aportación económica a ese reencuentro con la normalidad que tanto anhelamos todos.

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Mientras llegan los refuerzos, cualquier ayuda, por pequeña que sea, será siempre bienvenida.

Y para terminar, aunque esta entrada no vaya de F1, creo que es una manera como otra cualquiera de saldar mis deudas, de devolver lo que mis vecinos, familiares y amigos, hicieron por mí en 1967: mostrarme el camino de la esperanza en una noche partida en dos por el fuego y el miedo.

Ahora lo llamamos solidaridad, antes lo llamábamos cariño, pero en el fondo se trata de lo mismo.


PD: Va por todos los lorquinos, aficionados o no. ¡Mucho ánimo!