Empiezan bonitas las vacaciones de invierno. Mohamed Ben Sulayem hace pública su intención de rescatar a Michael Masi si la oportunidad se presenta, y, de la nada, resurgen unas viejas declaraciones del hombre sobre cuyas espaldas descansan el presente y futuro de la FIA, que lo ensombrecen como misógino...
Creo no haberme equivocado en la secuencia cronológica, que podría ser, en todo caso, de haber ocurrido los acontecimientos en el orden inverso daría lo mismo, ya que la diversión estaría igualmente asegurada.
En una esquina del cuadrilátero Toto Wolff y su espinita flanderiana a cuenta de lo de Abu Dhabi 2021, tras él, David Richards masajeándole el trapecio y los esplenios de cuello y cabeza, y abajo Lewis Hamilton con la palangana, la esponja y la toalla. En el ángulo opuesto, el Presidente de la Federación, que no parece rival para el austriaco, pero cuyos guantes llevan escrito International Sporting Code en el cuero derecho y el nombre del felón australiano en el izquierdo.
Huele que tira para atrás a linimento, sudor y humo de puro barato, pero aún no hay sangre sobre la lona ni se sabe a ciencia cierta si los contrincantes llegarán enteros al duodécimo asalto. Eso sí, ha sonado la campana y todo indica que ha comenzado el primer round.
Os leo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario