Hay que dar gracias a Dios de que la temporada arranca en breve ya que, con un poquito más de tiempo de solaz palaciego, Lewis se nos ahorcaba de la primera acacia que encontrase a su paso porque para meterse en jardines es un puto artista.
Os cuento: hace un par de años decidí dejarme bigotón soñando con que se me pegase algo de Tom Selleck en Tres solteros y un biberón, tampoco es que esperase milagros, pero ha pasado el tiempo y cada vez me parezco más a Carlos Areces en la serie El pueblo... La vida, pienso, que es una cabrona y mira que a mi edad debería conocérmelas todas, o casi. La vida, también, que acostumbra a llevarnos por derroteros que ni imaginábamos. En fin, comparto esta anécdota chorra porque lo de mi bigote es ya un secreto a voces y porque creo que a Hamilton le ha pasado algo muy similar: pretendía confirmarse como un ser de luz y ha vuelto a mear fuera del tiesto.
Somos muchos los que no hemos sentido la apremiante necesidad de posicionarnos públicamente a cuenta del crimen que acabó con la vida de George Floyd, porque se da por supuesta nuestra posición, o debería darse. Cualquiera con dos dedos de frente y un poco de corazón ha sentido una desazón profunda ante un hecho que jamás habría tenido que suceder, que por recurrente incluso puede parecer normal, pero que nunca debería ser catalogado como tal porque supone una aberración propia de etapas supuestamente superadas por el ser humano, que, lamentablemente, siguen estando aquí mismo y echando raíces a nuestro lado.
En este sentido, nuestro hexacampeón no ha estado muy acertado afeando la Fórmula 1 y sus compañeros whites por no posicionarse ante el suceso, y menos en estos duros términos: «I see those of you who are staying silent, some of you the biggest of stars yet you stay silent in the midst of injustice. Not a sign from anybody in my industry which ofcourse (sic) is a white dominated sport. I’m one of the only people of colour there yet I stand alone. I would have thought by now you would see why this happens and say something about it but you can’t stand alongside us. Just know I know who you who you (sic) are and I see you…» ["I know who you are and I see you”: Hamilton tells F1 stars not to ignore racial injustice].
Y sí, «Just know I know who you are and I see you» suena a frase de Chuck Norris soltada por un privilegiado que, desde sus historias en redes sociales, sus millones en cuenta corriente y su comodidad británica, ha llegado a pensar que podía erigirse en agitaconciencias con tal de que le hagan casito.
Os leo.
Somos muchos los que no hemos sentido la apremiante necesidad de posicionarnos públicamente a cuenta del crimen que acabó con la vida de George Floyd, porque se da por supuesta nuestra posición, o debería darse. Cualquiera con dos dedos de frente y un poco de corazón ha sentido una desazón profunda ante un hecho que jamás habría tenido que suceder, que por recurrente incluso puede parecer normal, pero que nunca debería ser catalogado como tal porque supone una aberración propia de etapas supuestamente superadas por el ser humano, que, lamentablemente, siguen estando aquí mismo y echando raíces a nuestro lado.
En este sentido, nuestro hexacampeón no ha estado muy acertado afeando la Fórmula 1 y sus compañeros whites por no posicionarse ante el suceso, y menos en estos duros términos: «I see those of you who are staying silent, some of you the biggest of stars yet you stay silent in the midst of injustice. Not a sign from anybody in my industry which ofcourse (sic) is a white dominated sport. I’m one of the only people of colour there yet I stand alone. I would have thought by now you would see why this happens and say something about it but you can’t stand alongside us. Just know I know who you who you (sic) are and I see you…» ["I know who you are and I see you”: Hamilton tells F1 stars not to ignore racial injustice].
Y sí, «Just know I know who you are and I see you» suena a frase de Chuck Norris soltada por un privilegiado que, desde sus historias en redes sociales, sus millones en cuenta corriente y su comodidad británica, ha llegado a pensar que podía erigirse en agitaconciencias con tal de que le hagan casito.
Os leo.
5 comentarios:
Hola, José.
No lo tengo olvidado ni descuidado.:)
Lewisito es un baboso con mucho dinero, cierta influencia y mucha suerte. No sabe quedarse callado.
Ay!, british.
Les comparto un cortometraje, Modern Educayshun.
Expone un paradigma cultural que lamentablemente, gana adeptos día a día.
Un Hamilton bipolar, entre el veganismo y la crítica permanente hacia la organización que le dio toda su entidad y significado.
https://youtu.be/iKcWu0tsiZM
Hamilton es un racista.
Vaya, hacía tiempo que el jran campeón no mierdeaba a gusto como nos tenía acostumbrados años ha. Tanto así que uno ya había llegado a pensar que el tipo había madurado lo suficiente como para no volver a mierdear, pero la cabra tira al monte.
Así que un deporte dominado por blancos, y qué? Acaso la NBA no es un deporte dominado por negros? Qué problema ve él en eso, sobre todo teniendo en cuenta que él, que es un mestizo de piel negra, domina por encima de todo el resto de blancos.
Que este individuo, que es un elegido, casi un dios, que gana en una hora más que la inmensa mayoría en toda su vida, salga con este tipo de sandeces y reproches es de un mierdeo de nivel Olímpico.
Porque bien está que él haga las declaraciones públicas que tenga a bien si tan afectado está, pero que le eche en cara a sus compañeros de actividad no pronunciarse es para enviarle directamente al guano.
Además, demuestra ser un simple y un ignorante, porque lo que se ha cometido con Floyd ha sido un crimen, la injusticia sería que su homicida anduviera por ahí campando a sus anchas y no bajo una acusación de asesinato en segundo grado, como así es.
En fin, no sigo, que me enciendo.
Saludos.
Como hija de señor con bigotón Freddiemercuriano, te mando mi solidaridad infinita por el momento bigotón.
Vicisitud creo que estuvo muy acertado con su reflexión hace unos días, diciendo que si hubiesemos estado en temporada normal, Hamilton se hubiese callado porque ya lo hizo antes, con tal de tapar las vergüenzas en la F1. De hecho, recuerdo que nunca sacó a colación el tema de la raza, hasta que empezó la desidia de las victorias de Vettel y una decisión de los jueces le perjudicó, rompiendo la racha de favorecimiento en estas situaciones y se plantó con la famosa cuestión de que si esto pasaba porque era negro... Si realmente quieres echar algo en cara a la FIA, saca toda la mierda de todas las personas que sabes que te perjudicaron en tu lucha por razón racista y apoya a que otros negros puedan acceder a este deporte, no cuando te conviene.
Recordemos también que este señor se ha paseado con ropa de diseñadores que fueron conocidos por su relación con los nazis en sitios, cuanto menos, polémicos por la misma razón y pasó de pedir perdón o de dar explicaciones. Nos interesa hablar de la discriminación, pero no posicionarnos frente al holocausto? Ojo, que no todo el mundo tiene que opinar de todo, pero no deja de ser irónico, como lo de ser ecofriendly con un avión propio.
Y desde luego no acuso y soy firme creyente de la ideología que apoya el cambio de opinión como prueba de la maduración personal, pero siempre me planteo si lo que hace Hamilton es porque realmente le sale del corazón o por marketing. Entre otras cosas, porque no sé a qué viene tanta dureza acusatoria en redes, cuando no ha entonado mea culpa en las mismas cuando la ha cagado. Eso sí, soy supercolegui de otros negros y aliados que sí se están mojando y están haciendo activismo en primer grado, porque lo importante son los likes de la foto con mis coleguinchis.
Besotes
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