Por fin la FIA ha aclarado dónde van a estar situadas las dos zonas de DRS prometidas para el Gran Premio de China, tercera prueba puntuable del calendario de este año. Sin que hasta el momento tengamos constancia de si ha sido un parto largo o acaso una dilatada deliberación, tal extensa se ha hecho la espera que ya pensaba yo que se les había olvidado.
Sea como fuere, ya sabemos que la primera zona queda prácticamente intacta con respecto al año pasdo, con el punto de detección sobre la curva 12 y el de activación a 2/5 de la longitud de la enorme recta trasera. El punto de cierre, obviamente dependerá del arrojo del personal, pero estará localizado y seguro, antes de la curva número 14, palmo más, palmo menos. La segunda zona —tal y como estaba previsto porque no había que ser muy lince para calcular más o menos dónde iba a estar situada—, tiene su punto de detección en la frenada de la curva 16, la que completa el giro al trazado de Shanghai, y el de activación a unos metros de dejarla atrás, y de ahí todo para adelante hasta que el caracol enseñe sus cuernos.
Podríamos decir por tanto, que la fumata, a pesar de tardona, ha resultado blanca y encaja dentro de los pronósticos, aunque sigo reiterando lo que dije el otro día a cuenta de la panda de calzonazos que pululan en la FIA, y es que estamos a miércoles ¡coñe!, a un par de jornadas de que Shanghai International Circuit acoja los primeros entrenamientios libres del G.P. de China, y con una hambruna de F1 que nos tiene colmada la paciencia.
Dicho lo cual, hay que recordar inevitablemente que el pequeñín de Red Bull llega al gigante asiático con una bonita cantidad de papeletas para salir como entra, o sea, líder.
El RB9 va como un tiro, y aún mejor sobre suelo seco y calentito, circunstancias que se van a dar en Shanghai porque el pronósitco es de total ausencia de lluvia, con cielo nuboso pero temperatura primaveral (rondando los 24º), lo que nos pone en que el asfalto puede pasar olímpicamente de los 30 a poco que el sol ayude, que puede ayudar.
Mercedes AMG y Lotus, tienen en China una bonita oportunidad de reivindicarse, y Ferrari, la obligación de tocar podio en la figura de Fernando Alonso si la italiana pretende llegar a Europa en el primer vagón y no en el de cola. Sahara Force India seguro que vuelve a sorprendernos (en Ebay, la de Silverstone ha puesto a la venta los mecánicos y las tuercas de Sepang, en un pack 2x1 que sale a muy buen precio), y Williams también, aunque en este caso para mal, porque el FW35 ha sido analizado exhaustivamente, pero su 7º de caballería no llega hasta Barcelona. McLaren se dice que puede intentar sacar pecho, pero con la doble pull-rod y sin agua...
Pirelli estrena en Shanghai esta temporada sus compuestos blandos, lo que va a suponer el primer quebradero de cabeza para las escuderías porque ya sabemos lo que pasó con las gomas en Jerez y Montmeló hace unos meses. Vamos, que las ruedas con vitola amarilla son un completo enigma a día de hoy, y por ello, es de suponer que los equipos intentarán por todos los medios entenderlas cuanto antes, ya que la calificación en China es importante para intentar llegar vivo a la consecución de curvas que hay al término de la recta de tribunas, y el sábado, las ruedas italianas tienen mucho que decir, sobre todo en la Q3.
Pero como también son importantes para el domingo porque son las option y con ellas es con las que toca jugar a las estrategias, la verdad es que no sé cómo terminar esta entrada. En fin, que tenemos fumata blanca y que de momento, el Gran Premio de China se propone como entretenido y pleno de aventuras, al más puro estilo Big Trouble in Little China (Golpe en la Pequeña China en castizo). ¡Satisfechos, no?
Os leo.
2 comentarios:
Ah, pero ¿Force India ya ha terminado de realizar el pitstop? :)
Más está tardando en dimitir su vicepresidente por su "little trouble" con la seguridad vial...
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