domingo, 12 de agosto de 2018

Sinergia [Red Bull]


Lo hemos hablado lo suficiente en Nürbu como para que no resulte extraño esta mañana recordar que cuando algo funciona no conviene tocarlo.

En el caso de McLaren se podía incluso cuestionar la pertiniencia de su ruptura con Honda y su paso a Renault, pero en lo tocante a la austriaca hay que hacer un auténtico acto de fe para comprender las razones que han llevado a Red Bull a romper con la francesa, salvo que las miras estén puestas en el próximo cambio de reglamento (2021).

Haciendo un juego fácil con la frase más utilizada en medios, por los sotanillas y por la afición misma, para incidir en lo gravísima de la muerte que era la situación de Woking el año pasado —éste, el quid consiste en que a la británica se le ha olvidado hacer monoplazas—, «al menos puntúa y gana carreras» no era suficiente, y la aspiración de llegar más lejos ha llevado a Milton Keynes a desligarse de su proveedor desde 2007, que se dice pronto, hecho a partir del cual han surgido una serie de problemillas menores que han ensombrecido bastante el horizonte próximo para la de Horner.

Sin saber a ciencia cierta cuánto había de verdad en que Adrian Newey pasaba a la reserva dejando su puesto a Pierre Waché [Newey, el ingeniero de los cuatro Mundiales de Vettel, deja Red Bull], se aventuraba que su sustituto para 2019 iba a ser James Key, entonces en Toro Rosso, pero Key se va a McLaren y el RB15 está a medio cocer mientras ha sufrido un cambio de unidad de potencia de las de despeinarse (mirar por el rabillo del ojo a los de Zak Brown).

Para colmo de males, El RB14 está tocado por el desapego de Renault y porque su MGU-K parece que no encaja en el vehículo, y Ricciardo ha anunciado que ha hecho las maletas y se pira a Enstone...

Yo diría que a tenor de lo expuesto la cosa no pinta bien. Daniel, en buena lógica, habrá sido neutralizado para que no se lleve a su nueva casa más secretos que los imprescindibles, lo que acrecienta las dudas sobre el porvenir del RB15 y lo que el australiano podrá hacer en pista hasta Abu Dhabi. Max va a ser el estandarte y la punta de lanza y el ariete de Milton Keynes pero, sinceramente, no sé si tiene mimbres en la actualidad para estos menesteres. Un no parar, vamos...

En todo caso, que es a lo que vamos en esta serie, Red Bull no va a pillar a Ferrari ni a Mercedes AMG pero puede sobrevivir perfectamente con lo cosechado en las 12 carreras previas, aunque, obviamente, tarde o temprano se le van a echar encima. ¿Podrá defender el 3º puesto en la general de Marcas? Habrá que verlo, que decía aquél.

Os leo.

1 comentario:

anonimo dijo...

Tanto Ferrari como Mercedes cuentan con motores propios. Renault también, aunque hay que esperar a ver qué puede mejorar en los próximos años.
RB depende de Honda (motorista sin equipo propio) o con los millones de rumores (Aston Martin, Porsche, Cosworth, ...) a los que se la ha asociado con el próximo cambio de reglamento, cuando sea que suceda. Sí: Ese que va a lograr que todo mejore (menos presupuesto, mayor paridad, etc). El tiempo dirá.