lunes, 30 de julio de 2018

È molle come un gelato


Me estoy malacostumbrando. Entre que Gorliz ha estado de fiesta desde Santiago, y que hoy es puente porque mañana celebramos San Ignacio, me ha costado lo mío ponerme al teclado, no os creáis, tanto que ha dado tiempo a los que alababan el sábado el arreón de Hamilton en clasificación, a que anden hoy con los pañitos tibios de que el SF71H era muy inferior al W09 en Hungaroring...

Y quien habla de esto, menciona también a los que sólo ven odio en las críticas a Vettel sin asimilar, todavía, que Lewis va primero en el Mundial de Pilotos porque apenas se ha metido en problemas, y que Sebastian va segundo porque tal vez se haya metido en demasiados en las 12 carreras que llevamos encima.

No voy a tratar de convencer a nadie porque prefiero disfrutar de la playa, la vida, mis mascotas, el buen tiempo y mis ratitos aquí o en la cocina de casa, pero sí recordaré que la lógica tiene sus reglas y que éstas también son aplicables a la Fórmula 1. Así las cosas, si la máquina rossa era tan deficiente en Hungría como afirman los que tratan de justificar el carrerón del tetracampeón alemán, el epic fact del tetracampeón británico durante el sábado fue puritita castaña porque bajo esta perspectiva, el morenín de mi madre iba sobrado de cojones. No, amigas y amigos, las dos cosas a la vez no pueden ser.

Y con lo del de Heppenheim ayer ocurre tres cuartos de lo mismo. Obtiene 3 puntos en una maniobra excesiva, arriesgando. Y si no fuese que él es la fiera número uno de Maranello, dan ganas de decir: que lo siga intentado, que el año pasado perdimos el Mundial por inventar hazañitas donde no hacía puñetera falta y esta temporada vamos segundos por lo mismo...

En fin, quería hablar de Valtteri y aunque se me acaba el espacio de esta entrada, voy a hacerlo, porque ayer me pareció que hacía de víctima en el lance con Vettel, pero con Ricciardo se portó como un elefante en cacharrería. Desmedido, tosco, iracundo y torpe; vamos, que también se pegó un tiro en el pie por ir de sobrao.

Aunque bien es verdad que hay gente que lo agradece: «Finalmente Bottas è stato aggressivo! Di solito è sempre molle quell'uomo, è molle come un gelato. Finalmente è stato aggressivo, ma forse questa volta lo è stato un po' troppo. Ma meglio di niente...» [Bottas aggressivo? Era ora. E' molle come un gelato. La mia situazione per il rinnovo è complicata].

Daniel siempre es Daniel, por muchas circunstancias y también por estos regalazos que nos hace de cuándo en cuándo. Y por cierto, él mismo dice que lo de su renovación está complicada [Una de mosqueo], y eso que nos dijeron el fin de semana pasado que ya estaba atada y bien atada.

En fin, os leo.

2 comentarios:

Bertor dijo...

Para mí lo de BOT fue un "error no forzado". Iba con el alerón muy tocado, casi sin gomas, y debía frenar antes, pero frenó donde siempre. Resultado: el coche se le fue y se comió a RIC de costado. Tuvieron suerte ambos de poder seguir y me alegré mucho de que al final RIC le ganase la posición. Fue esa clase de "justicia divina" que debe existir.

BOT hizo de escudero y ayudó a HAM a ganar cómodo. Nunca sabremos si VET le habría dado caza de haber salido un segundo antes del box (eso merece una entradita).

Pero creo que BOT no fue agresivo, que de eso va la entrada. No creo que se hubiese tocado con RIC de llevar el coche bien. No es su estilo.

Cao Wen Toh dijo...

Pues creo que a Bottas se le están hinchando las pelotas con la mala suerte de Bakú, tanto escudero, tanto Mierda, tanto Mierdecilla, y tanta pifia de "estrategia" en su muro. Se le ve cabreao, cabreao.