La FIA, como de costumbre, se ha puesto de perfil con la meada fuera de tiesto que protagonizó Hamilton en el podio del Gran Premio de Toscana y, en vez de coger el toro por los cuernos, ha decidido revisar lo que se puede mostrar o no en las ceremonias previas y posteriores a la carrera —juraría que ya había algo a este respecto—, en lo que supone reconocer implícitamente que existía una laguna que conviene subsanar porque la ha encontrado el hexacampeón y esta vez pase, pero la siguiente no.
Por otro lado, Mercedes AMG, a través de su cuenta de Twitter, daba cobertura al conductor británico afirmando categóricamente que no han traído la política a nuestro deporte porque esto son Derechos Humanos, algo que a muchos nos hizo dar un respingo en la silla ya que hay que tener una empanada mental de narices para pasar por alto (o desconocer), que la lucha por los Derechos Humanos y el activismo en general, siempre es algo político. De toda la vida de Dios, vamos.
Entretanto, hemos conocido este martes que la ciudad de Louisville admite su responsabilidad e indemnizará con 12 millones de dólares a la familia de Breonna Taylor, mientras se compromete a revisar los procedimientos policiales para que no vuelva a suceder nada similar...
El mundo continúa dando bastante por el saco, para qué vamos a negarlo, pero podemos seguir durmiendo a pierna suelta porque Lewis amenazaba desde su cuenta en Instagram con no bajar la guardia y prometía seguir luchando: «I want you to know that I will not stop, I won't let up, I won't give up using this platform to shed light on what i believe is right. But this is a journey for all of us to come together and challenge the world on every level of injustice, not only racial.»
Nunca he sido mucho de figuras mesiánicas como Ozymandias (¡Moore, a sus pies!), pero tranquiliza mucho que, con la que está cayendo, sea precisamente un británico quien se eche a las espaldas una tarea tan hercúlea.
Os leo.
4 comentarios:
Tranquiliza tener de "Working Class Hero" a un pijo multimillonario. ¡Qué relax!
Acá por mi barrio se llama Mauricio...
Saludos desde el Coño Sur
Alberto vive en Puerto Madero. Y Cristina en Recoleta. Pero a ellos les da vergüenza ver tanta opulencia.
Nada peor que un desclasado. Esos son los que van por todo.
Una actuación irregular o no atenida a procedimiento de la policía de Louisville (Kentucky) puede constituir un delito de homicidio por negligencia pero nunca será un tema de DD.HH., porque dichos derechos están reconocidos en USA y en todo el orbe en el que rija un Estado de Derecho.
Esto de que actuaciones negligentes de la policía en USA con resultado de muerte, sean casos de racismo es como lo de los asesinatos machistas, donde seguramente el machismo no sea más que un componente marginal o adyacente del uxoricidio, pero por interés político se establece que es la causa principal en todos los casos, así por decreto.
A mí en principio no me parece mal que la F1 como "institución" lleve a cabo una campaña como la de "End Racism", porque hay racismo en el mundo y porque la F1 tiene muchísima visibilidad. Pero si la campaña es de todo el cotarro y se implican en ella los pilotos, entonces lo que no debe permitirse es nada que no esté en lo acordado; o sea, ni las camisetas reivindicativas de Luisito, ni tampoco que este presione a sus colegas con el tema de jincar la rodilla, mucho menos en nombre de un movimiento revanchista violento como es Black Lives Matter, que si en origen quiso significar una cosa, no tardó ni cinco minutos en ser expropiado por extremistas violentos que no van a concitar jamás el apoyo de una mayoría social por su propia naturaleza.
Luego ya vendría el hecho de que esta campaña la inicie un deporte-espectáculo creado y aún hoy mayoritariamente regido por el mundo anglo-germánico que es con diferencia el más racista que habita en el planeta...
Saludos.
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