domingo, 2 de febrero de 2020

¡Qué tiempos!


Al leer el otro día un artículo sobre un 312B con tracción a las cuatro ruedas [El Ferrari tracción total de Fórmula 1 que no fue], me vino a la cabeza una entrada sobre el Cosworth 4WD que escribí hace años [Papiroflexia para buscar la belleza], aunque sobre lo que me apetece echar el ratito hoy es acerca de las sinergias tecnológicas que se organizaban hace años, y que, desgraciadamente, hoy no son posibles gracias a lo granítico de nuestros reglamentos.

Lotus, Matra, McLaren, Ferrari y Cosworth, desarrollaron intentonas sobre la tracción integral en monoplazas más o menos en el mismo espacio y tiempo, básicamente porque creían que la exploración de ese camino podía arrojar ventajas en la competición. Iban por libre, se jugaron los cuartos y acabaron aparcando sus proyectos por diferentes razones. 

El invento tampoco era nuevo, la idea ya había sido aprovechada por el Ferguson P99 unos años antes [A Stirling le gusta éste], pero aquella era época de rescatar sueños de cualquier cajón y tratar de sacarlos adelante si los avances de la tecnología lo permitían, que lo permitían ya que los árboles de transmisión y ésta misma pudieran ser más livianos que una década antes pero más resistentes, lo que facilitaba mover unos neumáticos que ofrecían más superficie de contacto con el suelo. 
 
Temporadas después ocurrió algo parecido con las seis ruedas del Tyrrell P34. March y Ferrari apostaron con sus respectivas visiones de esta solución aunque sus coches jamás llegaron a competir con ellas. Pero a finales de 1981 se probó un Williams FW08D con tres ejes porque cabía la posibilidad de alargar las dimensiones de los pontones con ala invertida y aumentar así el efecto suelo...

No me enrollo, como decía al final del párrafo inicial hoy todo esto resulta imposible. La normativa ciñe tanto la actividad de los ingenieros que las sinergias existentes afectan a componentes o elementos que muchas veces pasan desapercibidos para el aficionado.

Y sí, creo que esto nos empobrece...

Os leo.

1 comentario:

ivano dijo...

La eterna disyuntiva, creatividad frente a ilegalidad. Entiendo que pueden haber marcos más amplios para la normativa, pero es que a los ingenieros de la FIA se la meten doblada si quieren los ingenieros de los equipos. Luego ya si eso... lo prohibimos al siguiente GP(Charlie, te envidio, estarás tomando unos Ardbeg 10 con Satanás).