Con el merequetén del cambio de propietario y denominación, y tabla rasa ejecutada con ella por los rivales, la posición de Racing Point Force India en la cuarta plaza por la cola dibuja una situación muy distorsionada.
Básicamente estamos ante una Force India renombrada y descafeinada en la suma de puntos, y con vuestro permiso, a partir de aquí la llamaremos así por no enredarnos demasiado, ya que salvo por estos pequeños matices, el equipo de Silverstone es el mismo que empezó en Australia y ha terminado con 111 puntos de los que sólo cuentan 52 —lo exacto es decirlo así.
Con este saldo, Force India sería quinta inmediatamente detrás de Renault (122), y no es descabellado pensar que incluso podría haber superado a la de Enstone si su reloj no se hubiese parado en agosto, o incluso, si la continuidad de Esteban Ocon o su inminente sustitución por Lance Stroll no hubiera durado lo que una telenovela.
En fin, habiendo comenzado francamente mal la temporada, precisamente por haber sufrido de incertidumbre y de inclemencias económicas en el invierno pasado, el VJM11 de Montmeló no era otra cosa que un VJM10 de 2017 convenientemente adaptado a las exigencias de 2018 y el asunto funcionó lo que podía funcionar. El fuerte de la que entonces dirigía Bob Fernley seguía siendo la unidad de potencia Mercedes-Benz que montaban sus monoplazas, de manera que muy apañadito todo, la indio-británica empezaba a mostrar sus uñas sólo después del Gran Premio de China, cuando el chasis y la aerodinámica se ajustaron a las prestaciones del propulsor alemán y empezaron a sacar réditos de la gama de compuestos Pirelli para esta campaña.
En fin, habiendo comenzado francamente mal la temporada, precisamente por haber sufrido de incertidumbre y de inclemencias económicas en el invierno pasado, el VJM11 de Montmeló no era otra cosa que un VJM10 de 2017 convenientemente adaptado a las exigencias de 2018 y el asunto funcionó lo que podía funcionar. El fuerte de la que entonces dirigía Bob Fernley seguía siendo la unidad de potencia Mercedes-Benz que montaban sus monoplazas, de manera que muy apañadito todo, la indio-británica empezaba a mostrar sus uñas sólo después del Gran Premio de China, cuando el chasis y la aerodinámica se ajustaron a las prestaciones del propulsor alemán y empezaron a sacar réditos de la gama de compuestos Pirelli para esta campaña.
Force India siempre nos ha dado lecciones de saber estar en tu sitio, y con más sentido en este 2018 que acabamos de terminar, por cuanto los 111 puntos totales dignifican el enorme esfuerzo invertido en sacar la cabeza del lodo mientras afuera todo eran piedras volando.
¿Mala gestión...? Yo no hilaría tan fino. La pésima situación económica que atravesaba la formación llevaba al menos tres años avisando de que podía estallar en cualquier momento y las circunstancias han definido que haya sucedido en 2018 como podía haber sido en 2017 o haber llegado en 2019. En todo caso, la temporada que viene estará marcada por la estabilidad aunque, a cambio, la presencia de Lance Stroll... ¡Ay la presencia de Stroll!
Os leo.
2 comentarios:
Lo siento pero toda esta operación siempre me ha resultado muy extraña.
¿Realmente deben perder los puntos por cambiar la titularidad del propietario?
¿Un piloto denuncia a mitad de temporada sabiendo que puede ocasionar la quiebra y luego lo renuevan cuando poco antes era un sobrevalorado a la sombra de una super promesa?
Con la venia de los beneficiados por el nuevo reparto de puntos y la "pájara" inicial de Mercedes, todo esto me huele a maniobra de Toto para conseguir un equipo B que se deje mangonear y que además ponga la cama.
De todas formas ¿qué más da? otro numerito más del Circo ante el que poco podemos hacer.
Un saludo
Sr.Polyphenol
No solamente piderden puntos, sino también "la pasta". Si el bueno de Stroll padre y su grupo tienen de más, bienvenido sea, porque lo van a necesitar.
Pero si andan justitos de billetera, no esperen de la "nueva Force India" (como sea que termine llamándose) más que el Williams de este año. Pueden tener a todo un Checo, e inclusive gente más o menos valiosa en los garages y en la fábrica, pero la performance se paga, y se paga con dinero.
Sds.
Martín
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