Bill y las historias pequeñas

El piloto de la fotografía de arriba es Elio de Angelis y su yelmo un Simpson Helmet...

Conocía la marca pero nunca me había molestado en saber qué había detrás, para qué vamos a enredarnos, pero el compañero Savinio ha tenido a bien escribir una nota en la entrada dedicada a Toro Rosso y, como quien abre de par en par la puerta de un encierro y queda cegado por la luz, descubro que existía un tal Bill Simpson que nos ha dejado el lunes pasado después de haber hecho del motorsport un lugar mucho más seguro.

Dos apuntes y comprendes inmediatamente lo mucho que queda por descubrir más allá de los focos: [Safety pioneer Bill Simpson, 79, dies] y [«¡No pienso dar un dólar a esos gilipollas!» Así fue el genio de la seguridad en las carreras]; y como quien observa la noche rebosante de estrellas sintiéndose infinitamente minúsculo, la realidad llama a la puerta: hay por ahí un montón de historias aparentemente pequeñas que se entretejen y dan sentido al firmamento..

Os leo.