domingo, 4 de octubre de 2020

Alguien tenía que hacerlo

Espero que estéis dando gracias a Dios, o a Cthulhu, por poder leer cada mañana y cada noche a un tocapelotas de estirpe, de esos que hacen bueno el proverbio ancestral «siéntate a la orilla del río y verás pasar al cadáver de tu enemigo», porque la paciencia es su gran aliada o porque tal y como están las cosas no queda otra o porque siempre toca hacer fortaleza de flaqueza...

Mucho se habla de las equivocaciones de Fernando Alonso en su vida profesional, pero Max Verstappen no le va a la zaga. Lewis Hamilton demostró de qué hebras estaba hecho en 2007 y ya era Campeón del Mundo al año siguiente. Sebastian Vettel fue sorpresa sustituyendo a Robert Kubica en 2007, se consagró en 2008 con Toro Rosso, obtuvo subcampeonato en 2009 e inició su acenso a los altares a partir de 2010. Cuatro títulos consecutivos, nada más y nada menos...

Nuestro holandés protagonista fue figura emergente en 2015, promesa sin discusión en 2016, pero ahí se nos ha quedado. 2020 y Honda se enajena para finales del año que viene y Marko amenaza con que Red Bull y Alpha Tauri podrían seguir la estela de la japonesa.

No pretendo hacer leña del árbol caído pero alguien tenía que decirlo: pintan bastos en sus aspiraciones para el hijo de Jos. Cinco años suponen demasiado tiempo cuando se pretende ser estrella en un firmamento donde apenas quedan huecos, incluso teniendo a Heineken detrás. Espera, espera, que la temporada próxima será la buena, pero el tiempo adecuado no llega, nunca llega, y las cosas cada vez se ponen más y más cuesta arriba. 

Dudo mucho que Red Bull-Honda consiga hacerlo en 2021. El RB16 es una máquina maravillosa pero no para hacer doblar la rodilla al W11 de Brackley. ¿2022? Sí, pero ¿dónde? En Mercedes no hay encaje porque a Lewis le va la vida comodorra, con Valtteri al lado, a ser posible. ¿Ferrari? A ver, Charles tiene contrato hasta finales de 2024 y Carlos hasta la culminación de 2022, y esto nos pone en 2023 para vestir a nuestro héroe de rosso, un suponer. Muy lejos...

No me enredo, a Max se le está pasando el arroz y vendría siendo hora de que empezáramos a aceptarlo. El mejor piloto de su generación sin sitio para demostrarlo. El paradigma de los nuevos tiempos abierto en carnes. Nos reíamos. Sin coche no hay paraíso, ni siquiera para Max Verstappen. 

Honda nos ha puesto frente al espejo. Os leo. 

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Es lo q tiene tantos títulos de una tacada, q el resto se come los mocos miserablemente. No sé ni para q corren...

Ya no hay plafones q se caigan ni nada q le ponga algo de salsa.

Pero es lo q ha gustado y sigue gustando así q palante, a x el séptimo y más allá. En 2021 el octavo, en 2022 el noveno, en 2023 el décimo...

A ver q nuevas ideas fuera de la pista se le ocurren al moreno, de tan aburrido de ganar carreras q va a estar. Poor man...


King Crimson

Anónimo dijo...

Pues no le queda de otra más que irse a la Fórmula Alonso.

Yo creo que en Renault harían una dupla para quedar en la historia. El único inconveniente sería Joss, haciendo el Anthony. Nadie es perfecto.

pocascanas dijo...

Y McLaren en dupla con su antiguo compañero, el de la eterna sonrisa?

Saludos...

Interlagos dijo...

Todos somos conscientes que con un coche igual de competitivo al Mercedes, ahora Max le estaría dando un buen dolor de cabeza a Hamilton.

Es una pena... porque así Hamilton sólo pensaría en cómo ganarle, y no en todas las chuminadas en que anda sólo por aburrimiento.

Saludos.