Haber tomado parte de quince ediciones de las 24 horas de Le Mans parece no ser poca cosa. Tener de compañeros a Henri Pescarolo, Jean Pierre Jaussaud o los hermanos Ferté, aumenta las bazas del piloto en cuestión. Hasta acá estos nombres son impresionantes en el mundo de la Resistencia, pero si a esto le sumamos haber corrido con su propio auto y ser, como Jack Brabham, Bruce McLaren o Dan Gurney en Fórmula 1, constructor-ganador, pone a nuestro piloto en otra dimensión.
Él es Jean Rondeau, nacido en la misma Le Mans (1946), es el único piloto ganador de la mítica carrera quien ha nacido allí, o sea es el único realmente local.
En 1978, Rondeau se inscribe en la popular competencia con un vehículo diseñado y construido por él, el Rondeau M378 Cosworth. Esa primera incursión en la clase GTP logra el 9º lugar en la general y la victoria en su clase. Después, un 1979 para olvidar y llega la edición de 1980...
Ya en esta edición, Rondeau tiene un nombre importarte en el mundo de Le Mans, pero su idea es luchar con los más poderosos que tienen nombre y denominación: Porsche 935. El David francés contra los Goliath germanos.
En la parrilla de salida, el Rondeau ha clasificado quinto, no obstante, ese día Le Mans se sentía muy local. Esto se ha visto con los problemas que han afectado a los Porsche, como la junta de culata en el auto de Henri Pescarolo y los discos de frenos en el auto del múltiple ganador Jacky Ickx. Rondeau y Jaussaud comienzan a escribir la historia.
Con arrancada bajo un monumental diluvio, de atrás hacia adelante, el Rondeau ha logrado recuperar las vueltas perdidas el día sábado para liderar el domingo. El clima también se mantenía aliado al presentar una pista mojada, con periodos de lluvia. Todos sabemos que la lluvia es el gran ecualizador.
A la postre de la competencia, y con alguno de los problemas solucionados en el Porsche de Jacky Ickx, a poco de la ajedrezada el belga se ha lanzado en búsqueda del Rondeau puntero. El piloto francés Jaussaud se encuentra acelerando todo lo que el auto y las condiciones le permiten, pero sin exceder los límites naturales. No obstante, la edición de 1980 debe ser para Francia. La Marsellesa debe atronar los campos de La Sarthe.
El cielo se alía de nuevo y confunde al equipo Porsche que va por neumáticos para piso húmedo. Jaussaud se queda con los slicks y con el triunfo para el Rondeau. Esta victoria es la segunda para un equipo completamente independiente desde el reinicio de las famosas 24 Horas de Le Mans en 1949, repitiendo la misma hazaña de Mirage en 1975.
El Rondeau (auto) competirá en tres ocasiones más, sin poder terminar ninguna de esas competiciones. Su momento de gloria se ha llamado 1980.
Título original: Prophète dans son pays (Profeta en su tierra)
Fuente: https://www.goodwood.com/
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