martes, 12 de mayo de 2020

Cuando hay ganas...


Con el fin de facilitar la convergencia con IMSA en 2022, y también para mitigar los efectos de la pandemia en las filas del WEC, la FIA ha retocado el reglamento para Hypercars (LMH) que entrará en vigor la temporada que viene, reduciendo peso y potencia con respecto a las cifras inicialmente previstas [La FIA modifie le règlement des Le Mans Hypercar].

«Le futur de l'Endurance se construit activement. La convergence ACO/IMSA, permettant aux concurrents de la catégorie reine de pouvoir courir en Championnat du Monde d'Endurance de la FIA et en IMSA WeatherTech SportsCar Championship est désormais concrète et complète. En effet, LMDh (Le Mans Daytona “h”) et Le Mans Hypercar sont désormais régis par des règlements convergents pour des performances similaires. Les équipes techniques de la FIA et de l'ACO ont travaillé sur une adaptation du règlement LMH, accueillie positivement par les constructeurs. Cette annonce est une nouvelle preuve de cette collaboration constructive, cruciale pour notre discipline...»

Y eso, que mientras tanto, en Fórmula 1 cuesta lo que no está escrito llegar a acuerdos para cambiar un miserable tornillo, y es que a lo peor nuestros equipos no son tan constructivos como aseguran de cara a la galería, y les gusta el follón más que a un tonto una tiza.

Sin duda es cuestión de verlo, ahí lo dejo, pero está claro que en otros entornos deportivos diferentes al nuestro basta que salte una chispa para que toda la maquinaria se ponga a funcionar en aras de obtener la electricidad en tiempo récord, que no es por nada, pero ha sido este pasado enero cuando conocimos que IMSA y ACO hacían migas con la creación de la categoría LMDh [Oficial: El WEC e IMSA confirman la unificación de sus reglamentos con la categoría LMDh].

¿Y nosotros? Pues haceros cuenta, va para dos años y medio, y con prórroga y dudas, que comenzaron las negociaciones propuestas por Liberty Media sobre las futuras unidades de potencia que entrarían en juego en 2021 —lo que llevó a que todo se quedara igual pero sin las incorporaciones de fabricantes diferentes a nuestros notables—, la definición del reglamento técnico y los benditos pormenores que sitúan el estreno del nuevo mundo en 2022 o 2023...

Luego hay quien nos llama agoreros y malos aficionados a los que pensamos que nos quitan hasta las pegatinas; pero nos las quitan, ¡pardiez!

Os leo.

No hay comentarios: