Fardando de reputación

Creed mucho a los ingleses que os va a ir de maravilla...

Hablaba totalmente en serio Ted Kravitz cuando aconsejó en 2021 a Verstappen que no tuviera la idea de protagonizar un Senna/Prost porque se labraría muy mala reputación en el paddock, ya que este bendito término tiene un valor incalculable para los isleños, fundamentalmente porque son ellos los que reparten las cartas, cuidan de las apariencias y ensucian la imagen de quien quieren.

Trataré de decirlo sin ofender a nadie: ¿fue polémico 2014 tras la intervención de Mercedes-Benz a resultas de lo sucedido en Bélgica? ¿La actitud barriobajera de Hamilton con su compañero Rosberg empañó el título del británico en 2015? En 2016, ¿quién jugó con ventaja en el seno de Mercedes AMG?, ¿quién no tuvo redaños para dar la revancha al año siguiente al elegido por los dioses...? Por ahí van los tiros. Nadie recuerda las órdenes que recibía Heikki Kovalainen en 2008 pero tenemos nítidamente grabado en la memoria el Fernando is faster than you! de 2010.

A los títulos conseguidos por Max en 2021 y 2022 no les pasa absolutamente nada, acaso, que a los especialistas ingleses les han sentado como sendas patadas en los cataplines y, en legítima defensa, han puesto a funcionar a pleno rendimiento la máquina de esparcir porquería y sembrar dudas sobre el holandés y su escudería. Por suerte para los que tenemos dos dedos de frente, el refranero español nos brinda una verdad que encaja aquí a la perfección: dime de lo que fardas y te diré de lo que careces.

Buenos días a todos. Os leo.