sábado, 12 de marzo de 2022

#Unboxing [Red Bull]

Por suerte, ir tarde con todo me ha permitido encajar la entrada correspondiente al RB18 de Milton Keynes, prácticamente sobre la vertical de la aparición de su última versión en Sakhir.

Y bien, he elegido una imagen lateral del bicharraco austriaco encabezando este texto para que apreciemos mejor el arco que se dibuja desde la punta de la nose hasta la terminación de los pontones, algo que me va a ayudar bastante a la hora de ahorrar líneas, ya que su intencionalidad parece clara: llevar el caudal frontal superior hasta el comienzo del difusor sin apenas ingerencias, lo que facilitará que éste se funda con los flujos laterales medios y aporte gran cantidad de aire atrás, ayudando, de paso, a arrastrar los caudales bajos.

Con suspensión pull-rod delantera, arquitectura que comparte con el MCL36 de Woking [#Unboxing (McLaren)], y un generoso anti-dive como también pudimos ver en el C42 de Hinwil [#Unboxing (Alfa Romeo)], la filosofía de la parte anterior apunta por un lado a mucha velocidad en recta y, por tanto, a necesidad de frenar de forma contundente y segura, y por otro, a ofrecer la menor resistencia posible al aire que llega de frente, ya que va a resultar indispensable en la zona central del monoplaza.

Y bien, este volumen medio del vehículo es el que se ha modificado, ofreciendo ahora un tallado en dos jorobas y una finalización más baja y abierta para que parte del calor del intake salga directamente sobre la parte visible del fondo curvado, casi a la altura del nacimiento de las ruedas posteriores. Mucho aire disponible, que, además, se intuye que llega con mucha velocidad y energía a la zaga del coche, con aportes de calor en los lugares idóneos... No sé, Rick, da la sensación de que el RB18 no ha descuidado el paso por curva y en terreno virado va a ser también muy rápido.

En líneas generales me parece un trasto jodidamente bien diseñado para lograr el añorado Mundial de Constructores y llevar a Max al segundo entorchado de su cuenta personal, una señora virguería que ha cuidado todos los detalles, incluso la cobertura de la unidad de potencia, que, salvando las distancias, recuerda a la del RB7 envolviendo el motor Renault, que incorpora un conjunto de agallas al estilo Ferrari pero mucho más pequeño y, por tanto, generando menos drag. El calor, de nuevo, que en este caso va a salir por donde debe: apoyando la función de la parte terminal del fondo curvado y el arrastre del aire hacia el vano del alerón trasero.

Mucho me temo que este Red Bull se va a convertir pronto en tendencia...

Os leo.

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