domingo, 20 de marzo de 2022

Scuderia

Estamos a dos gin tonic de que la prensa anglosajona comience a sugerir trampas o ilegalidades en el interior del F1-75 que ha llevado a la gloria a Charles y Carlos en Sakhir, pero, en el momento de ponerme a escribir estas líneas, la verdad es que me da un poco lo mismo por dónde salgan los guardianes de la llama, sus mamporreros, y el abundante gentío que sigue creyendo que Mattia Binotto no era el tipo adecuado. 

Por si no se me ha notado en el primer párrafo, diré claramente que estoy contento, muy contento, a pesar de que como escribía ayer mismo en Twitter: conviene tomarlo todo con mucha cautela, alegrías y tristezas incluidas, porque las armas no están todavía suficientemente afiladas.

Obviamente no podían faltar los del fenómeno suerte para explicar lo ocurrido en Bahrein, pero tampoco me alteran el ánimo. Mercedes AMG ha encarado 2022 mostrando demasiadas debilidades, y Red Bull, algo necesitada de más aire circundando su unidad de potencia, y digo «su» porque ya estamos endosando el fracaso a Honda, cuando en sentido estricto, esta gama de su producto es más made in Milton Keynes que Sakura patanegra.

En fin, es cierto que ha habido suerte —siempre la hay—, aunque ha beneficiado más a Lewis Hamilton que a los ragazzi de Maranello, ya que, el inglés, en las últimas vueltas, ha visto cómo se caían dos de sus rivales más importantes, lo que le ha abierto el camino hasta el tercer cajón del podio, porque si no, ¿de qué?

En el caso de Leclerc no, y en el de Sáinz tampoco. El primero ha enseñado al vigente Campeón del Mundo que este año hay cosas que no va a poder hacer, y, el segundo, ha demostrado en pista que La Scuderia está lista para intentar hacerse con el de Marcas y el de Pilotos. Los dos han hecho un trabajo fabuloso, y el muro rosso también, para qué vamos a negarlo si casi se me saltan las lágrimas viendo lo bien que salían los cambios de neumáticos...

Os leo.

3 comentarios:

DeLorean dijo...

Pues más allá de Max, que también, a quien le ha dado una lección hoy el piloto más rápido de la parrilla es a todo un siete veces campeón del mundo. No solo por la manera en la que ha desarmado a VER sin una sola pasada de frenada (en estos coches es muy complicado), sino en el reinicio tras el SC. Abierto, bien abierto para dejarle al de atrás un interior con sobreviraje y ganar valiosos metros por la aceleración de tracción. A lo mejor, en vez de llorar tanto y echar a Masi, el inglés tendría que haber pilotado con ese nivel. Hoy no he visto a mi Charles acortar ninguna curva e irse recto cuando Max le ha lanzado su bomba... ha bastado con aguantar el envite sin miedo, como ya hiciera en Silverstone después de que los comisarios le robaran aquella victoria de Austria. Lewis ha olvidado de dónde viene, no sabe dónde está y ni mucho menos a dónde va.

De todo el fin de semana me quedo con la megapole del chaval, confirmando mi teoría de que cada vez tiene más cara de aquel Mika del 98 que me llenó la habitación de posters. Y no solo por las similitudes de su año 2021 con el del 97. Ni siquiera porque en su segunda clasificación ya batió a todo un especialista como Ayrton, sino porque el modo de lograrlas es la misma; lo ves pasarse un vértice aquí o en Bakú, poner una rueda en los muros de Singapur como Mika las puso en la sagrada tierra de Ímola... y pim, pam, pole. Son diez sin haber tenido nunca un Mercedes o un RB. Espero que el fin de semana de hoy se lo dedique al amigo Marko.

La mejor pareja de pilotos merece gente como Mattia y chapeau para los mecánicos. 2,5 hoy con ruedas más pesadas. Sé que eres ferrarista, ya sabes que yo nunca he sido de equipos, así que enhorabuena y como dirías: Forza Ferrari!

Antonio L. dijo...

Enhorabuena a Ferrari, por fin empieza la temporada como uno de los mejores.

Un saludo de un alonsista.

Erathor dijo...

Por lo que a mi respecta, chapeau. Nunca me ha gustado tanto Ferrari como desde que llegó Binotto.