Masashi Yamamoto se siente triste porque Honda cerrará su proyecto en Fórmula 1 (2015-2021), cuando a finales de diciembre ceda los trastos, las patentes y el copyright a Red Bull, pero no es quien decide ni quien elige los caminos de la japonesa, ni su rumbo, por supuesto. Él sólo quiere cumplir su trabajo y, a poder ser, celebrándolo por todo lo alto con la victoria de la austriaca en Constructores y coronando a Max Verstappen como Campeón del Mundo.
Quién nos lo iba a decir cuando la recibieron a zancadillazos, cuando por poco electrocuta a Fernando Alonso, cuando la prensa anglosajona y sus maporreros insistían en que Honda había olvidado hacer motores, cuando Zak Brown afeó a los de Sakura con aquellos vídeos, quién iba a pensar que en menos tiempo del que necesitó Mercedes-Benz para poner a punto su unidad de potencia, los del Sol Naciente iban a hacer palidecer a los alemanes en pista, que es donde más duele.
Ojalá lo consigan. Os leo.
2 comentarios:
Pues como gane rb, se les va a quedar cara de tontos a los japoneses...
Se van de la F1 y "casualmente" gana al año siguiente el Brawn GP.
Deciden no continuar con los motores y ganan el campeonato...
Más bien parece que están deseando marcharse con un corte de manga.
Nunca a un motorista se le pusieron tantas trabas en su entrada en la categoría.
Eligieron el proyecto equivocado y dijeron que si a demasiadas cosas.
Está claro que la relación coste-beneficio de marca ha sido un desastre. La imagen de marca cayó por los suelos para el mejor fabricante de motores del mundo.
Quieren irse con la cabeza alta y con un: ¡Que os den!
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