sábado, 3 de septiembre de 2022

Sono qui!

Haber regalado tantos puntos con tal de mantener vivo el drama y el campeonato, y no por este orden [Cars a la Carta], le ha supuesto a Ferrari llegar a Zandvoort con un puñado de obligaciones inexcusables, por decirlo en suave, y la más importante de ellas pasa por poner sus coches, en lo que queda de campeonato, en las dos primeras posiciones tanto en clasificación como en carrera, parte espinosa del asunto porque viene siendo el Talón de Aquiles de la italiana, ¿¡qué os voy a contar!?

Lo de ocupar las primeras plazas en clasificación tiene su aquél en que así limitamos los riesgos de que Mattia e Iñaki se enreden elaborando estrategias defensivas durante la prueba —¡patadón y p'alante!, que decía el bueno de Javi Clemente. 

El resto requiere rezar mucho, mucho, muchísimo, para que Lewis y George estén entonados en Países Bajos y consigan la tercera y cuarta localización al terminar la cita, y puesto que el quinto lugar es de Fernando por legitimidad y tradición —también valdría un podio del asturiano con los Brackley boys detrás—, sería deseable que Max no superara la sexta posición final, o, en su defecto, churruscara la unidad de potencia de su RB18 y abandonara, que, a ver, no es un anhelo muy deportivo que digamos pero a Maranello le vendría muy bien, y no os pongáis esquisitos con esto porque en fútbol no se ve mal cruzar los dedos para que un tiro acabe en el palo o, en un penalty, para que el lanzador mande la pelota donde la colocó Sergio Ramos en la semifinal de la Champions del Real Madrid contra el Bayern de Múnich.

La teoría creo que está bien armada y ahora sólo falta concretarla a partir de esta tarde con la intención de llegar a Monza con el agua sin llegarnos a la barbilla. La Scuderia ya está aquí y únicamente queda gritar Forza!

Os leo.

3 comentarios:

Cao Wen Toh dijo...

El Gromenagüer se ha dedicado desde la centésima cero a pegarle patadas al los palos del sombrajo. El enemigo dentro.

Cao Wen Toh dijo...

Incluso al principio de temporada, cuando RB fallaba, deberían haber dicho que el horizonte estaba en 2023. Rueda debe ir buscándose otro eje.

Anónimo dijo...

Solo le falta cambiar su sede Maranello a Alcoy. Por eso de la moral del Alcoyano que profesan sus fieles