domingo, 6 de junio de 2021

Omaha 07:03

Prácticamente en estos mismos instantes pero de hace 77 años, los paracaidistas de las fuerzas aliadas ya pisaban suelo francés. Horas después, las playas de Normandía se convertían en un festival de sangre, horror y muerte. Los jefes, cuando no pueden aplastar al enemigo como machacan una colilla contra el fondo del cenicero, mandan hombres a que se enfrenten a otros hombres, a que hagan el trabajo sucio, y los visten diferente para que la historia sepa distinguir quiénes fueron los buenos y quiénes hacían de malos...

Desconozco qué extraño magnetismo ejerce sobre mí este episodio de la II Guerra Mundial, pero hoy, 6 de junio, me apetecía reseñarlo en Nürbu.

Mis disculpas. Os leo.

1 comentario:

olhado_lh dijo...

Nunca sera suficiente homenajear a esos valientes, y tantos otros, que lucharon contra, permitanme que no sea ponderado, el mal.