Qué tiempos aquellos en que suponía pecado de alonsismo protervo cuestionar el trabajo de Otmar Szafnauer en Alpine y decirle a Fernando que se fuera de Enstone, criticar a la escudería franco-inglesa, no sé, intuir que el vaso se vaciaba mientras los expertos auguraban el éxito de las grandiosas ideas del genio...
Todavía no había llegado el momento en que el de Oviedo anunció su paso a Aston Martin en 2023. Éramos unos insensatos, unos soberbios por recriminar que al Nano no se le diera el material ni las condiciones idóneas.
Luego fue peor, claro, vendíamos humo por ganar seguidores o sepa usted qué otra oscura intención.
Pero hoy McLaren ha superado a Alpine en la general de Constructores a pesar de que, en líneas generales, sólo viene contando Norris en Woking, y sería injusto cargar las tintas sobre el trabajo de los cuadros intermedios, el personal de la fábrica y los pilotos, porque la responsabilidad sigue estando donde ha estado siempre: en el plano de la gestión deportiva del equipo y la toma de decisiones. Szafnauer, sí, Szafnauer.
Pintan bastos para la niña de Renault en Fórmula 1, y esto que digo es una evidencia: venimos de no sumar puntos ni en Italia ni Singapur y vienen penalizaciones por cambio de componentes o sustitución de unidades de potencia, y eso, a ver qué ocurrencias tiene Otmar y qué dicen los expertos y la gente seria...
Os leo.
3 comentarios:
Como alonsista firmaría que Alpine no le ponga motor nuevo, y en las próximas carreras rompa todos los usados hasta que no le quede más opción de ponerle el nuevo. Así pierden en marcas también. Retorcido? Tsufufu nos sorprenderá
Ayer comenzaron las etapas más dramáticas del vía crucis hacia 2023 de Alpine. Ocon se queda, Alonso se va.
Na, un Ralpineing Point en toda regla. Quién nos iba a decir que un equipo tan resultón se iba a ir a la mierda en cuanto apareció el pelotas del jefe este. Rossi lo ama.
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