miércoles, 19 de septiembre de 2018

Hasta que yo diga


Si el caso de Lance Stroll entra dentro de las paradojas que admite el aficionado sin pestañear, me resulta muy complicado de digerir la doble vara de medir que está aplicando a Raikkonen. El hijo del multimillonario canadiense tiene el poder que le otorga la pasta de su padre, y Iceman, un nombre y un recorrido que le hace merecedor de un asiento seguro en 2019. Sinceramente, no veo dónde está el problema.

Hemos manoseado este mismo asunto varias veces en Nürbu. En 2012, Mark Webber aseguraba continuar teniendo hambre de victorias mientras la peña se descojonaba de la ocurrencia y solicitaba que Red Bull lo sustituyera más pronto que tarde. Antes que con el australiano sucedió tres cuartos de lo mismo con Rubens Barrichello o Michael Schumacher, y después, con Felipe Massa, incluso ha pasado con Fernando Alonso, y en toda lógica, llevamos unas temporadas escuchando el sempiterno: ¡retírate de una puñetera vez!, esta vez en alusión a Kimi.

Salvando las enormes distancias entre unos y otros, lo cierto es que todos ellos tienen en común que se sienten pilotos de Fórmula 1 y eligen su momento de irse. Bueno, en el caso de Rubinho no fue exactamente así. El brasileño perseveró hasta que se cruzó en su camino una emergente estrella del volante que seguramente recordamos por su exitosa carrera profesional en la máxima disciplina: Bruno Senna.

No pretendo hacer sangre innecesaria ni mostrar los feos costurones de nuestro negocio/espectáculo, pero tampoco puedo evitar recordar que no siempre es aplicable que un piloto de determinada edad esté haciendo de tapón a cualquier jovenzuelo que sólo trae un montón de promesas debajo del sobaco.

A mi modo de ver, una de las cosas más atractivas de la Fórmula 1 sigue siendo que podemos disfrutar desde un cómodo asiento en primera fila de butacas, de ese proceso de destilación que supone que noveles y consolidados se partan la cara por medrar o mantenerse en una historia que, mal que queramos, únicamente ofrece 20 plazas disponibles.

¿Sobra Kimi? Yo negaría la mayor. Obviamente desconozco cómo lo hará en Sauber, pero si él se siente todavía con ganas yo lo respeto porque entiendo que los pilotos son quienes mejor saben cuándo están de sobra —también es verdad a mi Felipe hubo que recordárselo en 2017, aunque en sentido estricto la culpa no fue suya, sino de Williams, que lo repescó cuando ya había decidido jubilarse en 2016. 

¡¿Que alguien quiere su puesto?!, pues que se lo dispute, ¡coño! Lo prefiero mil veces a dar por bueno que el manta de Stroll tenga asiento asegurado y nadie ose discutirle ni una coma, mientras que para el último Campeón del Mundo de la rossa todo sean pegas, simplemente porque ya tiene una edad y pretende seguir compitiendo.

Os leo.

3 comentarios:

Fabian Prieto dijo...

Tan decrépito está el tipo que hace dos semanas hizo la pole más rápida de la historia y habría ganado la carrera de no haber sido por el enésimo error de estrategia de su equipo. Venga, que siempre que ha tenido auto y oportunidad ha hecho algo.

Elín Fernández dijo...

Estuve en tuiter discutiendo algo similar con una pseudo periodista "experta" que vive en Montreal, la verdad no sé bien su nombre, ni me interesa. Pero la cosa es que cada vez que la encuentro en tuiter, es con el mismo comentario de que " esto ha sido así siempre". La cosa es que le discutía que esta F1 anda muy mal. Que mirar a Ocon casi sin asiento mientras el hijo de papi Stroll, no sólo compra asiento en Williams si no que hasta equipo tiene, es un claro mensaje de el estado casi crítico en el que está este deporte-negocio.
Me sacó en cara sus éxitos en categorías inferiores. Yo por mi parte le dije que no me venga con el podio de causalidad que logró en Bakú. Entre dimes y diretes, le hice unas preguntas: ¿Por qué si es tan bueno, tiene que pagar a Williams por su asiento?,¿por qué si es tan bueno, papi tiene que compararle un equipo?,¿se ha visto en la historia de la categoría que un padre compre un equipo para que su hijo pilote?
Todavía espero respuestas...

Jose Tellaetxe Isusi [Orroe] dijo...

Muy buenos días ;)

Fabián ;) Creo como tú, que Kimi todavía tiene bastante que decir. En Lotus también le daban por acabado. Demasiada presión en su retorno de los rallies, dijeron... Espero (y deseo) que Iceman siga dando guerra por mucho tiempo ;)

Elín ;) Totalmente de acuerdo. A tenor de su desempeño en Fórmula 1, me temo que el recorrido de Lance es bastante corto incluso con su padre como mentor. Sin la pasta que tiene detrás sin duda ya estaría descartado para el deporte :P

Abrazotes

Jose