El viejo y el mar

Para qué me iba a tomar la molestia de escribir una entrada cuyo título fuese «Vuelvo el viernes» con lo bonito que queda titularla «El viejo y el mar».

Me debo volver a leer el bendito libro de Hemingway y terminar 15 Cuentos de Poniente y 1 de Levante de mi buen amigo Germinal Castillo.

En realidad me debo muchas cosas más y no sé si dispondré de tiempo para recuperarlas todas en apenas cuatro días. Tampoco es que haya espacio para más con las abuelas en el foco de atención, pero puesto que para seguir soñando despierto conviene cerrar los ojos de tanto en cuanto y el mayor ejercicio de libertad consiste en tomarla cuando te apetece, hace un ratito me he quitado la armadura y he decidido dejarla aparcada hasta el próximo viernes.

Ha sido una temporada buena para Nürbu. No me quejo. 541 entradas con ésta en lo que llevamos de año. Técnica, opinión, reflexiones, historia, idas de olla, incluso espacio para Roberto, Gonzalo, Iron y Dama. Todo lo tenéis ahí, a mano, en el histórico, por si os aburrís esperándome. Luego ha estado también lo que he escrito para otros lugares y hemos ido incorporando al hilo #Hemeroteca... Pero toca descansar un poco y eso es precisamente lo que me dispongo a hacer desde que escriba Os leo hasta dentro de unos días.

Ni redes sociales ni blog. Apago las luces y vuelvo el viernes. Avisados quedáis.

Portaros bien mientras tanto. Os leo.