sábado, 7 de septiembre de 2019

De momento, Charles


Cómo nos gustaba alabar a pilotos de raza como Verstappen cuando el holandés se negaba a seguir las instrucciones que le daban en Toro Rosso para que dejase sitio a Carlos Sáinz, o más recientemente en Red Bull, cuando su compañero era Daniel Ricciardo, y cómo se nos llenaba la boca con la palabra «hambre» cuando supimos que el velociraptor Hamilton acostumbraba a pasarse por el forro de los pantalones los pactos establecidos con Nico Rosberg en los briefings...

Charles Leclerc nos ha salido tan malote como ellos aunque es más de usar guante blanco. Llega a Monza con la victoria en Spa-Francorchamps bajo el brazo y pretende vencer en el Templo de la velocidad ante su público, seguramente con la intención de cerrar la brecha abierta en Ferrari desde que Fernando Alonso cruzara primero la meta en el santuario, un lejano 12 de septiembre de 2010. Y claro está, si Caín suponía un escollo esta tarde, Charles ha sido quien ha cogido en sus manos la quijada de asno y ha atizado a su hermano, básicamente porque Sebastian no buscaba la victoria de la mítica sino salvar su propio culo con excusas baratas.

En ese final de clasificación que si lo firma Billy Wilder da para comedia grandiosa, Vettel ha tenido oportunidad de arrear como un demonio porque Sáinz ha dejado hueco, aunque ha preferido escuchar la dulzaina y esperar a que Leclerc le hiciera el trabajo, pero el único piloto Ferrari en pista se ha dejado de monsergas y se ha ido tras el español mientras el alemán ni lo intentaba...

Hace demasiado tiempo que no tenía sensaciones como las de hoy. A Sebastian se le ha olvidado lo guay que resultaba saltarse la Multi 21 y, al respetable, que Senna y Schumacher crucificaban primero a sus compañeros antes que ocuparse de otras cosas.

Leclerc tiene una miserable oportunidad de hacer algo y la aprovecha así no se lo perdone la flor y nata de ese ferrarismo de pandereta y decorado que no ha entendido todavía que el monegasco es nuestro futuro.

Le falta hacerse pero tiene mucho tiempo por delante. Hoy, repito, Charles era el único piloto rosso que tenía en mente vencer en Monza, empezando por la pole, claro está, porque detrás de los de Brackley como que no. Y ha ejecutado soberbiamente el primer paso. De momento y hasta que la FIA termine de marear la perdiz, Leclerc ha dado dos mazazos a su compañero del alma, uno siendo más rápido y otro enseñándole los dientes.

Os leo.

4 comentarios:

Soy gilipollas dijo...

Con el rebufo en Monza se ganan cerca de 4 decimas.Leclerc se ha aprovechado del de Sebastián como estaba previsto pero Ferrari le ha impedido hacer el suyo calculando mal.Si esto pasa al revés ya sabemos que no escribirías esto,sino que Ferrari sabotea a Leclerc y demás conspiranoias.
En lugar de reconocer que sin esas 4 decimas Vettel se ha quedado a décima y media.Como se nota que no has visto la onboard con la pedazo de vuelta que se ha marcado el aleman yendo a por la pole.Pero ya sabemos,desde el sofa siempre es mas facil y el amigo Sebastián dejó muy jodido a muchos.

Jose Tellaetxe Isusi [Orroe] dijo...

Hola, colega

Hoy te voy a dar tu caramelo a pesar de que, como es costumbre, tampoco te has leído la entrada. Búscame la línea en que diga que Charles ha jugado limpio... No la vas a encontrar. Pero a lo que vamos, lo que te jode es que Vettel ha pecado de pardillín porque pensaba que se está jugando los cuartos con Webber, Ricciardo o Raikkonen. Hoy Leclerc le ha dado de su propia medicina porque mañana, si Ferrari quiere conseguir algo va a tener que apostar por su mejor piloto en clasificación o hará el ridículo más espantoso...

Y por cierto, el alemán no tenía que estar en Q3 esperando el bendito rebufo, a Albon le han quitado el tiempo por sacar las ruedas de la pista y a Vettel se lo han perdonado porque siempre se lo perdonan. Así se construye un campeón de los tuyos, que la caga en Canadá y vuelve a cagarla en Monza, pero ¿cómo era aquello?: renta mucho a sus equipos, el tipo es la mar de rentable, pero sigue sin ganar este año.

Pásalo bien en tu sofá.

Jose

Otro Jose dijo...

Vettel no le ha dado ningún rebufo a Leclerc. Leclerc en el mejor de los casos ha cogido el rebufo de los dos Renault que estaban bastante lejos en el inicio de su vuelta.

Vettel marca su tiempo faltando 6:50, Ricciardo 6:48, Hulkenberg 6:46 y Leclerc 6:45 (aproximadamente). Sólo hay que ver el vídeo oficial de la F1 para comprobarlo.

¿Cómo va a devolver Leclerc un rebufo si Vettel está 5 segundos por delante en su intento? Los rebufos, si se dan ayudando de verdad, son sin piloto ajenos al equipo. Además, cuando han vuelto a salir todos después de la bandera roja el tiempo era escaso.

Cuánto "enterao", la mayoría vettelistos.

carlosike20 dijo...

Yo nunca vi que vettel ayudase a su compañero, lecrect hace su vuelta detrás de los Renault.