miércoles, 1 de febrero de 2017

Susanita tiene un motor [02]


Montezemolo, queriendo o sin querer, ha abierto el melón más sabroso: las interrogantes que obtienen respuesta a ocho años vista, o así.

En fin, somos unas alcahuetas de tomo y lomo, aunque luego vamos diciendo por ahí que rechazamos las conspiraciones porque lo nuestro es el rigor y tal (¡ya!), pero mordemos el anzuelo, incluso sin gusana, a poco que nos vendan una historia bonita que justifique aún más nuestros firmes prejuicios.

Brawn ya gozaba de una preciosa aureola de santón de lo nuestro cuando Adrian Newey afirmaba a comienzos del año pasado que «El coche de 2009 [RB5] sufrió cambios importantes por las regulaciones y porque hubo un debate sobre el Doble Difusor ya que había que decidir si era legal o una decisión técnica fuera de las normas. [...] No se aceptó porque Max Mosley quiso dar una lección a Ferrari y McLaren» [dentro enlace].

El momento era ideal de la muerte para hacer revisionismo al estilo de Singapur 2008, pero los ex-pertos entendieron una vezmás, que Ross, el gran beneficiado de aquel asunto, era más listo que el hambre y había nacido con una flor en el culete, más o menos como todos los británicos en F1. Bueno, como casi todos, que los hay de primera, de segunda y de tercera división.

Por si faltaban mimbres para un cesto, existía más mandanga, pues luego se dijo que Sakura habría ayudado al sostenimiento del equipo durante 2009... De forma que Brawn compraba un equipo por 1 dólar y contando con el apoyo económico de Honda, que acabaría vendiendo por 100 millones a Mercedes-Benz. Además, con el coche ya terminado, pero sin motor y sin tiempo material para adaptar el chasis a un nuevo propulsor, da con el apoyo solidario de Mercedes-Benz y el FO 108W de la alemana encaja en el RA109 como un guante de gamuza ayudando a dar a luz al BGP001.

De rebote, o eso nos contaron, Brawn se encuentra con que Mosley quiere quiñar a McLaren y Ferrari y admite a trámite un invento que se había echado para atrás en el caso de Renault y alguna otra escudería más que no recuerdo ahora, pero que se había aceptado en el caso de Toyota, Williams y Brawn GP. Iba contra el espíritu de la normativa recién estrenada, enfocada a reducir las excelencias aerodinámicas, y acabaría sentenciando la temporada: el doble difusor...

Son demasiadas coincidencias incluso para alguien, como yo, que no cree en las conspiraciones.

Si John Le Carré estuviera escribiendo esta entrada, haría párrafos que habría señalado a Ross Brawn como el topo perfecto. Un agente doble, un individuo que decía estar trabajando para un equipo cuando, en realidad, lo estaba haciendo para otro. 

En toda esta historia hay una constante: Brawn, y un personaje Sideshow Bob: Stuttgart, y las coincidencias son casualidades hasta que Newey nos contaba en 2016 qué sucedió en 2009 y Montezemolo descubre ahora lo que le había dicho Lauda.

A partir de aquí, teniendo en cuenta que Mercedes-Benz trabajaba desde 2007 en su objetivo y que en 2010 volvía a la máxima competición, el de Ashton-under-Lyne deja de ser un angelito y se convierte en un personaje turbio pero indispensable para entender el dominio de la de las tres puntas de 2014 a 2016.

No quiero extenderme. Nadie recriminó nada a Brawn por renunciar a defender en 2010 el título de marcas conseguido con Jenson Button y Rubens Barrichello un año antes, como se ha hecho con Nico Rosberg, por ejemplo. Estaba bien y era normal, y había que aplaudir, que una escudería salida de la nada con la ayuda de Faemino y Cansado, surgiera como por arte de magia, venciera, convenciera y se dejara caer en manos de la multinacional alemana para que ésta nos mostrara cómo se hacen las cosas. No como Ferrari, sino invirtiendo y trabajando duro, ¡faltaría más!

Pero si a todo esto sumamos que cuando en 2011 se empieza a trabajar sobre lo que será la normativa 2014, Ross ya ocupa puesto de Master & Commander en el Grupo de Trabajo y Montezemolo nos cuenta que Mercedes se mostró inflexible en las negociaciones, resulta sencillo colegir que el inflexible fue el suertudo estratega británico.

Sea como fuere, es de sobra conocido que la Bruja de Blancanieves se bajó los pantalones ante Zetsche en 2012 por el caso Gribkowsky [dentro enlace], que luego vino el Pirelligate de 2013 y que al final, Bernie se quitaba el mosqueo de encima acusando a la germana de actuar con enorme ventaja ante la normativa 2014 [dentro enlace]. Más tarde viene lo de Newey sobre 2009 y ahora tenemos a Montezemolo lanza en ristre...

Con lo narrado podemos entender que Brawn sería el novio perfecto para la hija de cualquier suegra, porque mientras nos preguntamos si Susanita tenía un motor y si con ello nos hemos ido un poquito más al carajo que con el dominio de Red Bull, la prensa especialista y los ex-pertos que rechazan conspiraciones vuelven a vendernos la excelencia de Ross, ahora como Hermano Prefecto de la congregación Liberty.

Continuará...

Os leo.

3 comentarios:

Cao Wen Toh dijo...

Como yo no tengo un blog ni una trayectoria que defender, insistiré en lo que vengo diciendo desde hace tiempo: me da que Mercedes "compró cuatro campeonatos que, por vergüenza, han acabado en sólo tres. El otro día hablando de tenis insinuabas apoyos "arbitrales" de caserismo inglés hacia un piloto... inglés; desde el año de Brown se ha visto cómo mediante todo tipo de artimañas normativas se favorecía a un coche (que sería como darle a un tenista una raqueta con ayudas que los demás no podrían tener). Si no se han cargado la F1 es porque nuestra pasión por los coches es infinita.

Anónimo dijo...

Hola. Hay varias dudas que me surgen de esta teoría.

1) El anuncio del cambio a los V6 turbo híbridos se hizo en diciembre de 2010. ¿Cómo ninguna empresa iba a haber invertido en desarrollar un motor desde 7 años antes? Nadie sabía que iba a ser implantado.

2) ¿Por qué Mercedes no habría comprado directamente el equipo Honda un año antes por 1 dólar en vez de un año después por 100? Se ahorraban pasta y sacaban publicidad inmediata.

Un saludo.

Jose Tellaetxe Isusi [Orroe] dijo...

Buenas tardes ;)

Cao Wen ;) Dónde hay que firmar eso?? Estoy de acuerdo al 100% ;)

Anónimo ;) El problema no es el cambio en sí, que si mal no recuerdo, ya estaba planteado incluso antes de 2009 y el KERS, sino que según Montezemolo y Lauda, M-B tenía definida su UP antes de que el Grupo de Trabajo se pusiera a ello, y en el caso del italiano, que nos dice que M-B impone ese diseño porque se muestra muy dura en las negociaciones.

Es decir, todos no empiezan a la vez. Y para cuando se hace oficial que empiezan, es el diseño de M-B el que sale adelante.

Y en cuanto a la segunda pregunta, sospecho que porque de ir directamente a comprar Brackley, no había costado ni 1 ni 100, sino muchísimos millones más ;)

Un abrazote

Jose