Pocas veces ha sentido tan pocas ganas de ponerme a escribir sobre una despedida, y no es porque no tenga cosas que decir ni que agradecer, ni siquiera es porque el personaje impone tanto que podría dar miedo intentar abordarlo en unas líneas. Todo se reduce a que es Pau el protagonista de este texto y sin él en la cancha nos queda por delante un bonito espacio vacío que no sé cómo coño vamos a rellenar.
Vivimos tiempos de mierda en los que el escritor Pérez-Reverte y la diputada Olona hacen méritos para protagonizar alguna entrega de The Expendables junto a Stallone, Norris, Schwarzenegger y la tropa habitual de duros de película, en los que Miguel Ángel Carmona podría incluso interpretar al villanito en alguna de 007. Teníamos un gigante de verdad, un cabo guía de esos que te valían para un cuento de niños o para tirar de los Chicago Bulls, los Lakers de Los Ángeles o la selección española de baloncesto, y el hombre ha decidido que ya iba siendo hora de que nos apañemos solos...
Te echaré de menos, Pau Gasol. Os leo.
2 comentarios:
Verdades como puños.....a este hombre,a este deportista,lo deberian de estudiar los niños en los colegios,ser asignatura obligatoria,por su vida,por su persona,por su dedicacion,por su humildad,su compañerismo,con mas personas como ellas,seria un mundo mejor.
No podríais haberlo expresado mejor.
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