martes, 23 de octubre de 2018

Tranquilizando al ñu


Ross Brawn ha salido a echar un capote a Sebastian y la cosa empieza dar un poquito de vergüenza ajena, más que nada, porque no recuerdo un deporte de élite donde tanta gente se haya juramentado a la vez en sacar las castañas del fuego a un astro que se supone que se ha forjado bajo presiones descomunales.

Sea como fuere, Vettel sigue en caída libre, como hemos podido comprobar en Austin, y si desde Monza todo ha sido excusatio non petitas a su alrededor, a tres carreras de cerrar el campeonato y sorprendentemente con el título todavía en juego —por la mínima, sí, pero aún en juego—, que acuda Liberty a recordarnos que cuatro títulos no se ganan así como así viene a sintetizar el miedo que hay en el negocio a que la temporada quede marcada por los errores del alemán más que por los méritos del británico.

Se dice que el de Heppenheim se ha dejado en el camino más de 60 puntos que nominalmente le pertenecían, lo que nos pone en que a Hamilton le ha venido Saint George a ver con más asiduidad de la que puede soportar un espectáculo que dice de sí mismo que es el pináculo del automovilismo deportivo. En este sentido, justificar a Sebastian es justificar también a Lewis, y desde luego, maquillar además una temporada marcada por los errores y ausencias de los dos únicos candidatos, porque, aceptémoslo: gracias al formato de nuestro deporte, sólo el de Brackley y el de Maranello han tenido opciones.

Así las cosas, la errática trayectoria del piloto de Tewin durante la primera parte de la campaña sólo se ha visto paliada por la incontestable capacidad de su W09 y por las cagadas de Vettel —de este escenario surge el grueso de sus pérdidas—, y cuando el guión requería drama del bueno porque Lewis ya había encontrado el tono para defender su corona y, en consecuencia, se preveía un final de infarto, Sebastian comenzaba a deshacerse como un azucarillo en agua tibia a partir del Gran Premio de Italia...

Hemos hablado mucho de todo esto y en realidad no hay nada nuevo bajo el sol. Hace no demasiado tiempo daba un 6 o 6'5 a 2018 porque está suponiendo un Mundial que se dirime en base a la cantidad de errores que cometen los rivales, no a su excelencia en pista. Hoy bajaría la puntuación a un 5'5 o 6, y la muestra más evidente está en el tsunami de paños tibios que surgen cada dos por tres al respecto del tetracampeón del mundo 2010-2013.

Liberty teme la estampida. La prensa italiana no ceja en vapulear al alemán y la contestación no se ha hecho esperar: hay que salvar al soldado Sebastian (y al soldado Lewis también). Los títulos del primero están en entredicho y eso es malo para el negocio porque Vettel se supone que volverá a luchar por el del año que viene. Los ñúes —como habíamos previsto, por cierto—, van dejando solo al de Heppenheim y se están pasando a las filas del verstappenismo con absoluta naturalidad, pero muy bien le tienen que ir las cosas a Red Bull con Honda para que Max se enfrente de tú a tú a Hamilton en 2019.

Brawn no quiere este panorama. Ferrari y el guión precisan que Sebastian continúe materializando la oposición al Rey de Reyes, por eso el de Liberty nos recuerda que cuatro títulos no se ganan así como así. Si sabrá él cómo se ganan...

Os leo.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Quién pone en entredicho los títulos de Vettel o Hamilton? ¿Un campeón como tú? ¿Desde su casita y al teclado de un ordenador? ¿O los acólitos ñues resentidos porque cuando vieron a su Alonso perder titulos en la última carrera los han ganado estos 2 fenómenos quitándole la gloria? Eso sí que es cuñadismo. Y luego a llorar por Twitter y demás. En fin, os dejo que sigáis ganando títulos y jugandoos la vida a 300 por hora,campeones.

Antonio L. dijo...

Los dirigentes pasados (Berni & company) de la F1 prefirieron enzalzar a unas escuderías frente a otras y como consecuencia a unos pilotos frente a otros, en vez de fomentar la igualdad entre escuadras para que la F1 hubiese sido un calco de la temporada 2012 donde hubo tanta igualdad al inicio de la misma entre coches y pilotos.

No supieron o quisieron ver el magnífico espectáculo que nos brindaron esos pilotos motivados por la repentina igualdad que se estableció por circunstancias que espero que nuestro capitán nos lo pueda aclarar algún día.

Es cierto que las victorias de Hamilton (gran piloto sin ningún género de dudas) se ven empañadas por la falta de competencia directa al no saber aprovechar su "enemigo Vettel" las armas de las que dispone. Se podría hablar largo y tendido de las causas de esta falta de competitividad de Sebastian, pero creo que lo principal radica en que sus cuatro títulos mundiales no los tuvo que luchar siendo el más débil de los candidatos en liza (es decir con un coche inferior al resto). Mentalmente no sufrió y por tanto no se vacunó frente a lo que ahora le está pasando, y cuidado que solo le queda una bala en la recámara que es el próximo año.

Respecto a Verstappen, reconozco que este jovenzuelo me gusta porque es un luchador nato y no parece que se rinda en cuanto las cosas le van mal (ya veremos en un futuro). Es indudable que tiene mimbres de futuro campeón del mundo, al que la prensa y aficionados a falta de un contrincante mejor lo esperan como agua de Mayo para que luche contra el referente actual de la F1 Hamilton.

Si MClaren y Renault junto con Red Bull el año próximo consiguen acercarse a los dos aventajados de la clase, quizás ese año nos depare una de las mejores temporadas en F1 del último decenio, porque tendremos a cuatro gallos peleando por el reinado del gallinero. La pregunta es ¿Quién de los gallos se convertirá zorro?........

Un alonsista.



Antonio L. dijo...

Me gustaría contestar al anónimo del primer comentario en el que lanza una serie de preguntas a nuestro Capitán por mi cuenta y riesgo.

Respecto a la primera creo que nadie pone en entredicho los títulos de ninguno de los dos citados, si has leido habitualmente este blog, lo único que se hace con datos objetivos es aclara si los títulos se consiguieron con más o menos dificutad, siendo esta simple característica lo que determina su valía frente a otros títulos.

LLevo bastantes años leyendo este blog y creo firmemente que José es un campeón en lo referente a sus comentarios y análisis que por su puesto te gustarán más o menos pero que nadie podrá decir que no los razona, algo de lo que carecen muchos de los comentarios que le dedican personas como tú.

No querrás que los comentarios los haga desde la calle y con libreta y lápiz digo yo..... Un ordenador es una herramienta muy útil y desde casa se pasa menos frio.

Los acólitos ñues como defines a los que seguimos y admiramos a Fernando Alonso no estamos resentidos, estamos fastidiados porque las circunstancias (suerte para algunos) no estuvo del lado de nuestro piloto, pero no por eso creo que los títulos no sean merecidos por sus rivales. Solo hacemos ver que nuestro piloto nunca tuvo en esas luchas el mejor coche y por tanto tuvo más mérito que el que ganó con mejor vehículo.

Espero que respondas a este comentario y me sepas razonar porque tanto Fernando Alonso es tan mal piloto, persona o lo que quieras expresar.

Capitán disculpa el que haya respondido al guante que te han lanzado.

Un alonsista

Jose Tellaetxe Isusi [Orroe] dijo...

Buenos días, Antonio ;)

Todo esto me ha pillado haciendo la compra y te agradezco tus palabras aunque al «ñu» que nos ha visitado le entrarán por una oreja y le saldrán por la otra. Ni conoce Nürbu ni lo que escribo ni cómo lo hago, le importa sólo lo que digo sobre Sebastian. Por no acertar no acierta ni en lo que se supone que es mi actividad «llorosa» en Twitter.

Y ya en el meollo: Quien está poniendo en entredicho sus títulos se llama Sebastian y se apellida Vettel, un piloto que no gana si no sale delante, que a veces, saliendo delante tampoco lo consigue. Un astro del deporte que soporta pésimamente la presión, que regaló el título 2017 a Lewis Hamilton y se lo va a volver a regalar este año. Un Mesías de Maranello que no es capaz de certificar su supesta calidad ni con un misil bajo el culo.

Pero esto, a los ñúes les importa un pimiento, Antonio, ésta es la cruda realidad ;)

Abrazote, comandante ;)

Jose

Antonio L. dijo...

Al contrario, gracias a tí, que te sigo desde el aciago 2007 donde supiste poner cordura, valentía y verdad a las mentiras que soltaron por su boca todos los envidiosos que por lo visto no pueden soportar a once años vista que los títulos de sus favoritos (Vettel y Hamilton) se han desvalorizado porque no tuvieron contrincante con el que luchar con sus mismas armas.

Si esos títulos los hubieran ganado con armas parecidas a sus rivales, posiblemente ahora serían héroes de verdad y no de cartón piedra. No creo que ninguno de los que expresamos nuestras ideas en este blog tengamos culpa de esa circunstancia. Todos estos descerebrados deberían enviarle sus comentarios y mala sangre a la cúpula de la F1 para que se pongan las pilas y nos sepan preparar un espectáculo grandioso y sobre todo entretenido.

Un abrazo y como siempre un placer leerte.

Un alonsista.

Anónimo dijo...

Lo ha dicho Newey. El facilitador de los 4 títulos del alemán. Te cito alguno más?

Anónimo dijo...

Lo que me preocupa, es la que los dueños puedan estar tramando para el próximo año.

Ferrari no soporta otra temporada así. Y para el espectáculo esto es muy malo. Canta demasiado.

Unknown dijo...

Como de costumbre cada vez que ha estado bajo presión frigodedo se ha roto como un reloj barato.

Y la suerte de que los compañeros de box han sido unos gentleman, que otros le hubieran sacado de pista por poco más que un Multi21.

Anónimo dijo...

Vettel es un piloto que se quiebra con la mínima presión tal y como ha demostrado en estos años que no ha tenido un avión dos segundos más rápido que el resto, quien no quiera ver esto es que es ciego o imbecil directamente, como el anónimo del primer comentario. El problema de Twitter es que le da voz a manadas de idiotas e indocumentados tal y como afirma Umberto Eco. 60 puntos ha tirado por la borda un tetracampeon mundial, ya se ve su calidad...

Anónimo dijo...

Hombre yo no creo que nadie discita que Vettel tiene 4 títulos. Y tampoco que si los tiene es porque los ha ganado teniendo el mejor coxhe y muchas veces con una gran diferencia. Este es un deporte donde el coche es fundamental y gana el que tienen el mejor y solo en contadas ocasiones, si los dos coches están cerca, gana el.mejor piloto. Se puede ser el mejor y no llegar a los puntos. Eso creo que nadie lo puede discitir tampoco, al menos nadie que siga la F1 mínimamente

Marta