No es machismo

El espectáculo ofrecido por una parte de la afición española como respuesta a un reciente acto promocional de Lotus en la red de redes —podemos llamarlo así—, amén de paupérrimo en contenido, sólo es comparable a la gilipollez que le entra a quien proclamándose liberal, se rasga las vestiduras en público porque en el fondo, no deja de ser un cool bastante cateto o cateta, por cierto.

Ponedle al asunto el género que os venga en gana, pero lo cierto es que a Carmen Jordá le han llovido boinazos hasta en el cielo del paladar por currar de lo que sea en Enstone, y ojito, que el machismo no ha tenido nada que ver en todo ello, que aquí la peña se ha despachado a gusto porque ella ni es piloto ni es nada, porque se equivoca o miente, porque está como un tren, porque hace de florero, porque su puesto es la escudería británica lo podría estar ocupando otro, porque lo ha dicho Michèle Mouton, porque los cuñaos siempre son los demás, y porque para equitativos, nosotros.

Manda un poco de huevos que nadie haya caído en la cuenta de que la que merece las críticas es Lotus, tan canina que anda la que lleva la vitola de los coches de Chapman, que se ve obligada a recurrir a cosas tan feas como usar a la de Alcoy sin el mínimo decoro, con tal de mantener su equilibrio presupuestario.

Pero eso tampoco es machismo, leñe, que no os entra por mucho que fuese precisamente lo que entresaqué de las palabras de la piloto de rally más exitosa y famosa de todos los tiempos y hoy presidenta de la Comisión FIA para las mujeres. «Otras chicas de menos éxito han conseguido subir en la escalera del automovilismo, pero eso tiene más que ver con estrategias de marketing y cuestiones políticas sobre las que no estoy para nada interesada.»

Pero a ver quién tiene cojones de afear a Lotus o de hablar de ese tipo de política a la que hace referencia Mouton en su comentario, teniendo a Carmen para tirarle piedras. La valenciana es bonita, forma parte de la tripulación, viste como ellos, sale en televisión, también se muestra pelín machista para no desentonar, se codea con gente del paddock e incluso charla con Bernie Ecclestone. Ha cometido un pecado del que no es totalmente responsable, pero no importa, en la actitud de nuestros chavales y chavalas y de algún juntaletras durante estos días pasados, no hay nada reprochable, sencillamente porque están tan bien educados, que ni saben lo que significa la dichosa palabra.

A ver, os echo una mano tirando del diccionario RAE: «Machismo: 1. m. Actitud de prepotencia de los varones respecto de las mujeres.»

Sí, ya sé que ella se lo ha buscado y que todo esto no es machismo, pero lo parece y eso es lo que más me jode, ya que estreno etiqueta con su apellido cuando lo que me gustaría sería ciscarme en los muertos de tanto gilipollas como abunda.

Os leo.