sábado, 31 de agosto de 2019

Anthoine Hubert


No conocía a Anthoine Hubert. Su apellido me suena, pero poco, seguramente de haberlo leído en alguna parte. No soy habitual de las fórmulas menores porque mi tiempo da para bastante menos que a otros y es algo de lo que no me arrepiento. Total, que me he pasado la tarde huyendo de las coño especulaciones, que han debido salir abajo de Santo Domingo en plan encierro de sanfermines y al parecer no me han pillado, por suerte debería decir, aunque tampoco es que me preocupe tanto.

También he pensado en los pocos muertos que acumulan a sus espaldas algunos, déficit que les ha llevado a tratar a sus compadres como parvulitos y a negar a los que no conocían a Hubert la posibilidad de llorarlo, como si fuese tan sencillo, como si resultase posible no sentir nada ante un chiquillo que tiene la mala fortuna de rebotar en las protecciones y anclar su monoplaza en la trayectoria de Correa en pleno arranque de la recta de Kemmel...

No, no conocía a Anthoine, aunque después de haber leído algunas anotaciones sobre él intuyo perfectamente que le gustaría que celebrásemos su partida hablando de carreras, viéndolas, disfrutándolas, ayudando a Juan Manuel a que se recupere pronto y a que despeje rápidamente esa duda que lo acompañará siempre.

Si no hubiese tenido tan triste final estaría apreciando el accidente como un hecho totalmente fortuito en el que no se pueden delimitar responsabilidades, y eso mismo es lo que voy a hacer: sentirme mal porque un azar ha tenido tan funestas consecuencias, morderme la lengua evitando hablar de Felipe Massa, y lamentar profundamente no haber conocido a Hubert antes, porque aunque parezca increíble, esta es la parte que más me duele.

Os leo.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Vuelvo a publicar un comentario en tu blog después de bastante tiempo, y por desgracia las circunstancias no podían ser peores. Hoy ha sido un día trágico para cualquiera que se considere amante del deporte de motor, y no, yo tampoco conocía a Anthoine, no éramos amigos, pero tampoco pude evitar emocionarme al ver el desenlace. Hoy se ha ido uno de los nuestros, y es nuestro deber, tanto como aficionados como a nivel humano, el honrrarle hoy, así como apoyar a todos sus seres queridos. Mañana será una carrera triste, muy triste. Un abrazo a todos y descansa en paz, Anthoine.

Antonio L. dijo...

Hoy es un día muy triste para todos los aficionado al motor. Que una una vida tan joven acabe de forma tan abrupta no es justo.

La casualidad y la fatalidad se han aliado en tu contra Antoine. Has vivido poco pero has dejado este mundo haciendo lo que más te gustaba. Saluda a Ayrton y a Jules, diles que nunca os olvidaremos.

D.E.P. Un saludo de un Alonsista.

matador dijo...


Que la tierra te sea leve, Anthoine. Que el recuerdo no te pese demasiado, Juan Manuel.

Siempre que escribo aquí parece que lo hago envuelto en la nostalgia de tiempos pasados, pero no va a ser hoy. Ayer la vida nos recordó que el automovilismo es un deporte de riesgo en el que pocas veces pasan cosas, pero que cuando pasan, lo hacen de verdad.
Sacudido el dolor y la consternación, habrá que analizar las causas y pensar en evitar que vuelva a pasar. Cada vida que se ha cobrado el deporte es un paso adelante en seguridad para los que siguen, aunque el precio siempre ha sido demasiado alto. Espero que esto sea compatible con Spa, el Radillion y Eau Rouge.

Salu2!